México es el país con más bienes inscritos en la lista del Patrimonio Mundial en toda América, con un total de 32: veintiséis en la categoría de patrimonio cultural, cinco en la de patrimonio natural y uno en la de ‘bien mixto’, esta última es la primera en América Latina.
Localizado al sureste de la República Mexicana, Campeche es ideal para la aventura y el aprendizaje por su variedad natural y cultural. Se engalana con sitios arqueológicos mayas, haciendas del siglo XVI y edificaciones históricas como la Catedral de Campeche, la Mansión Carvajal o el Palacio Municipal. El visitante también puede conocer la extensa muralla que resguarda a San Francisco de Campeche, capital del estado y ciudad colonial declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1999, gracias a su arquitectura y a sus enigmáticos baluartes.
Entre sus antiguas ciudades mayas destaca Calakmul, una de las más importantes por extensión y por población, pues llegó a tener más de 50.000 habitantes.
Su cronología se remonta al período Preclásico (300 a.C – 250 a.C), mientras que su momento de esplendor se dio en el Clásico.
Calakmul se encuentra dentro de la Reserva de la Biosfera de su mismo nombre, que tiene más de 723,000 hectáreas y es la mayor de las cinco áreas naturales protegidas de Campeche. Las seis mil estructuras que componen los yacimientos de la ciudad abarcan un espacio de unos 70 kilómetros cuadrados, la zona monumental comprende unos dos kilómetros cuadrados y tiene unas mil estructuras.
Ubicada en la frontera oriental de Campeche con Quintana Roo, esta enorme reserva, que abarca el 15% del territorio de Campeche, es la mayor extensión de selva tropical en México que ofrece una de las mejores oportunidades eco-arqueológicas del mundo maya. Alberga 86 especies de mamíferos –jaguar, puma, ocelote, tigrillo, jaguarondi, oso hormiguero, mono araña, mono aullador y tapir, entre otros–, alrededor de 282 especies de aves, 50 especies de reptiles, 400 tipos de mariposas y 73 tipos de orquídeas silvestres.
La reserva fue creada en 1989 como un gran experimento de protección ecológica, y en 1993 se abrió un camino pavimentado para facilitar la excavación de varios sitios arqueológicos.
Calakmul, con su espesa selva de la que únicamente ha sido descubierta una pequeña parte que abarca 100 kilómetros cuadrados, es espectacular. Se han encontrado ricas criptas funerarias, más de 120 estelas ricamente labradas y unos seis mil edificios.
En 2002 la UNESCO nombró a este sitio Patrimonio de la Humanidad; segunda designación de este tipo para Campeche. En junio del presente, la antigua ciudad maya de Calakmul y los bosques tropicales de la zona fueron inscritos como ‘bien mixto’ en la lista de Patrimonio Mundial de la UNESCO, destacando tanto el valor cultural como el natural de la zona «por representar un testimonio excepcional de la civilización maya y por la convivencia armónica con su entorno natural megadiverso», informó el INAH.
La misma zona está incorporada desde 1993 en la Red Mundial de Reservas de la Biosfera del Programa
El Hombre y la Biosfera de la UNESCO.