Inicio Blog Página 37

Los mejores hoteles de México según sus huéspedes.

Si hay algo que no se puede negar es la variada oferta hotelera que tiene nuestro país en cualquiera de las ciudades más importantes que los turistas quieran visitar. Y es que ya sea que se trate de un All Inclusive en Yucatán, o un hotel ejecutivo en Guadalajara, México tiene un excelente servicio, con instalaciones increíbles y siempre la calidez de su personal a disposición para que los visitantes se sientan como en casa.

Y si de la opinión de huéspedes de trata, hay algunas plataformas turísticas que además nos ofrecen la posibilidad de leer sus reseñas y así poder elegir el mejor hotel para nuestro tipo de viaje.

En esta nota te proponemos hacer un repaso por aquellos hoteles en México que poseen los mejores comentarios de viajeros que se alojaron y que pueden dar testimonio fiel de la experiencia en cada uno de ellos. De esta manera hemos confeccionado un pequeño ranking en algunas las ciudades más populares dentro de las más elegidas por los turistas, y así poder brindarte la información que necesitas para hacer tus próximas reservaciones fácilmente.

Playa del Carmen

Uno de los principales destinos turísticos del país, playa del Carmen es elegido por sus increíbles playas, sus paisajes de ensueño y su mar turquesa. Además de tener muchas actividades para dejar contenta a toda la familia durante el día, posee una divertida vida nocturna que muchos buscan cuando parten de vacaciones.

Los hoteles en Playa del Carmen también merecen una mención especial y quienes la visitan saben que encontraran la máxima categoría hotelera. Todo el lujo y el confort que los huéspedes buscan, sin dudas, lo encontrarán en este destino exclusivo.

Dentro de la selección de hoteles en Playa del Carmen mejor comentados por los pasajeros, nuestra selección es la siguiente:

Suites Fenicia

Este pequeño hotel de 3 estrellas se lleva todos los aplausos por parte de quienes lo han visitado. A veces es cierto eso de que lo bueno viene en un envase pequeño, y este hotel es la prueba de ello.

Tiene todo lo que un pasajero espera, además de un precio increíble y la posibilidad de cocinar tu propia comida en tu asador privado.

Ocean Riviera Paradise El Beso – Adults Only

Si deseas vivir la experiencia de un verdadero hotel 5 estrellas sobre el mar turquesa del caribe, entonces este resort será el ideal. Aunque debes considerar que sólo se admiten huéspedes adultos.

Como siempre, la atención del personal, las increíbles instalaciones y la excelente comida, son los comentarios más destacados que ponen a este hotel dentro de nuestra lista de los más elegidos.

Antera Hotel & Residences

La ubicación céntrica es perfecta, según lo que comentaron los huéspedes en el sitio Despegar.com, así como la atención de su personal y los departamentos grandes y muy limpios. Sin dudas los puntos claves en los que muchos viajeros se fijan para elegir su hotel.

Querétaro

Una de las principales atracciones de México, es que no sólo los destinos de playa atraen la atención de los turistas. Si lo que buscas es visitar una de las ciudades más bellas que tiene México, descubrir sus calles y su centro histórico de estilo colonial, entonces esta es nuestra selección de los mejores hoteles según lo que han comentado los huéspedes que los visitaron.

Residencia Sofia

Hermosa casa de estilo familiar con todo lo que los viajeros quieren encontrar en su alojamiento lejos de casa. Acogedor, con una excelente ubicación y la mejor atención, son los comentarios mas destacados que hacen de este hotel uno de nuestros elegidos.

Definitivamente el servicio y las cálidas habitaciones son las características que todos destacan y que seguramente también apreciaras si te hospedaras aquí.

La Hija del Alfarero

Si lo que te gusta es alojarte en una típica casona colonial y vivir una experiencia inolvidable, entonces este hotel te encantara. Destacado por su excelente ubicación y la belleza de sus instalaciones, alojarte aquí será una maravilla para los sentidos.

Sin lugar a dudas, los comentarios más relevantes con respecto a este hermoso hotel son la decoración colonial y la calidez de su personal. Una excelente opción.

Holiday Inn Queretaro Zona Krystal

Si lo que prefieres es un hotel 3 estrellas con buena ubicación céntrica, y buenas instalaciones y atención, entonces esta es nuestra recomendación según la opinión de los huéspedes que han dejado excelentes reseñas.

Puebla

Definitivamente uno de los destinos más elegidos por el turismo, por tratarse de una de las ciudades con mayor patrimonio histórico local de todo México. Declarada Patrimonio Cultural de la Humanidad por la Unesco, Puebla de los Ángeles, como se la conoce comúnmente no defrauda con su belleza.

Para los que quieran alojarse aquí, esta es la recomendación de los huéspedes acerca de los mejores hoteles de esta ciudad.

Hotel Andante

Muy cerca de toda la actividad más atractiva de la ciudad, este hotel ha encantado a sus visitantes por su concepto y temática particular.

Destacando, como en todos los casos, la excelente atención de su personal y las hermosas instalaciones, este hotel es de nuestros preferidos de la ciudad.

Staybridge Suites Puebla

Este hotel que ha sido inaugurado hace muy poco se lleva todos los aplausos en relación a la calidad de sus instalaciones, la comodidad de sus apartamentos, la limpieza y el gran servicio de su personal.

La relación costo/beneficio también es una de las menciones especiales que han hechos los pasajeros que se han alojado aquí. Por este motivo es uno de nuestros seleccionados.

Mucho más para visitar

Por supuesto que México cuenta con cantidad de ciudades y destinos increíbles que vale la pena descubrir y visitar. En todos ellos encontrarás una propuesta hotelera muy interesante que seguramente estará a la altura de lo que estas buscando.

Por supuesto que te alentamos a que consultes las páginas de nuestros colegas de Despegar que nos han facilitado toda la información para poder realizar este ranking, donde además vas a encontrar todas las reseñas que necesitas, para cada ciudad.

La conjura de los necios

0

Autor: Cynthia Aguirre

El éxito, según preceptos actuales, requiere esfuerzo, preparación y, principalmente, envisionar el logro anhelado. El término, aún no aprobado por la RAE[2] , propone visualizar una meta y, además, experimentar la emoción que se vivirá al lograrla; llamémoslo un dejá vu invocado. John Kennedy Toole (1937-1969), autor del título en préstamo, quizás desconocía estas estrategias. Tras varios rechazos, asumió que su obra literaria carecía de méritos… y se suicidó. Para ser un necio, tuvo poca resistencia. Reflexionemos sobre los modos de persistir: Reflexionemos sobre los modos de persistir:             

Terco. La terquedad es más un asunto de vanidad que de conocimiento. Contrario al origen de la palabra que propone varias opciones -celta, latín o griego- un terco tiene una visión unilateral: es un déspota de lo cotidiano. Persona apasionada del soliloquio: hablar solo no tiene nada de malo; El problema es sólo hablar. Un terco se aferra a sus ideas; El necio a sus errores.

Necio. Lo reconocemos como un ser propenso a la repetición estéril: comete el mismo equívoco y espera diferente resultado. Todos conocemos uno -quizás conocemos al mismo- en su modalidad más molesta: el que reitera el error, pero se desafana de la consecuencia, colocándose como eterna víctima del entorno. Lidiar con un necio tiene una ventaja:  la predictibilidad, pues aun cuando se le presenta un nuevo camino, opta por el conocido, para tropezar con la misma piedra.

Tenaz. “Es un necio que logra el éxito”, afirmó hace años un amigo. Para lograr una meta, no basta con “atenazarse” a una visión, se requiere adecuación. La tenacidad es darwiniana; perdura el que se adapta a diferencia. Éxito no es tener la última palabra, es poder participar en las siguientes conversaciones.

Hablando de “últimas palabras”: las escritas por John Kennedy Toole fueron destruidas por su madre. Ella y su tenacidad lograron la publicación del libro… 12 años después de la muerte de John. 

Lo que nadie envisionó fue que la novela sobre un antihéroe, intelectual, virgen y con sobrepeso ganaría el Pulitzer, ventas millonarias y se convertiría en un libro de culto.

[1]  Segundo libro escrito por John Kennedy Toole, publicado de forma póstuma, en 1981.  Su primera novela La biblia de neón, se publicó hasta 1989.

EdTech – el impacto de la digitalización en el sector de la Educación

0

Autor: Lic. Rómulo Conde Machado

Ya llevamos años observando cómo las empresas “Fintech” están irrumpiendo en los mercados financieros y en los comportamientos del cliente de servicios financieros. La tecnología se ha convertido en un factor clave de cara al crecimiento en los mercados, sobre todo en tiempos donde el aspecto “time to market” se ha convertido en tan fundamental, que hasta las grandes o tradicionales instituciones financieras han creado sus propias divisiones dedicadas a adquirir start-ups e idear productos en ambiente start-up para no perder el tren hacia el futuro.

Las tecnologías de la información ya llevan tiempo transformando el sector educativo a través de ofertas de cursos de todo tipo y plataformas online donde obtener certificaciones profesionales, pero también encaminadas a facilitar la docencia a alumnos de preescolar en adelante.

La situación pandémica ha dado un considerable empujón a estas plataformas “EdTech”, por motivos obvios:

  • En situaciones de no poder ofrecer al alumnado la docencia vía clases presenciales, es importante tener la modalidad de aprendizaje remoto como plan B.
  • Asimismo, se ha visto que a través de una oferta de educación virtual, se puede llegar a un mayor número y segmentos de alumnos, democratizando el acceso a la educación, coadyuvando a eliminar barreras sociales. Obviamente, este último punto implica poner a disposición los medios técnicos mínimos necesarios.
  • Por otra parte, el segmento de certificaciones profesionales y cursos y formación complementarios también está experimentando un auge importante por la flexibilidad que ofrece.

Con todas las ventajas que tiene, también hay que tener en cuenta las siguientes limitaciones:

  • Falta de interacción social: los entornos virtuales alejan al alumno de la posibilidad de interactuar personalmente con otros compañeros de estudio, por lo que –sobre todo de cara a la educación de primaria y secundaria- es necesario emplear metodologías y herramientas que  permitan dicha interacción a través de grupos reducidos, con intereses compartidos, por ejemplo, a través de “break-out room” virtuales, o bien grupos de trabajo reducidos que se junten en espacios de co-working o bibliotecas públicas.

En resumen, es preciso mantener en nuestro radar iniciativas en el sector “EdTech”, incluso como vía alternativa o complementaria para llegar a más segmentos de alumnos, que además puede ayudar a conseguir a una buena educación esté al alcance de todos.

¿Qué son las habilidades blandas?

0

Las habilidades blandas son aquellas que impulsan la inteligencia emocional. También llamadas soft skills, habilidades transversales o socioemocionales, enfocadas en desarrollar ciertos valores y rasgos que fomentan la comunicación y la relación efectiva de una persona con aquellas que le rodean.

El mundo exige fomentar las habilidades blandas

Las actividades productivas han experimentado una transformación radical durante el último siglo: desde la incorporación de tecnologías de la información, hasta nuevas formas, ambientes y modalidades de trabajo. Las nuevas generaciones requieren desarrollar habilidades blandas a temprana edad para satisfacer esas demandas, algo que difícilmente se ha contemplado dentro de la enseñanza tradicional en las escuelas.

La tendencia en el mundo laboral es encontrar personal especializado, particularmente en el sector tecnológico; aunque todas las industrias requieren de talento adecuado dotado con habilidades socioemocionales, tales como:

  • Trabajo en equipo.
  • Empatía.
  • Adaptación.
  • Resolución de conflictos.
  • Comunicación, entre otras.

Estas capacidades, también pertenecen a las llamadas habilidades siglo XXI, cuyo desarrollo se está impulsando desde el sector económico a nivel internacional.

Un estudio realizado por LinkedIn en Estados Unidos a 291 directores de recursos humanos, concluyó que para los reclutadores es fácil encontrar a personas con conocimientos en sus áreas de especialidad; sin embargo, la tarea se complica al ahondar en esos perfiles en busca de personal adecuado con las habilidades sociales necesarias para cumplir eficazmente con las tareas que demandan los puestos laborales actuales como:

  • Tolerancia a la frustración.
  • Creatividad y proactividad.
  • Flexibilidad y adaptabilidad.
  • Disposición hacia el aprendizaje

Las habilidades antes mencionadas, así como la gestión efectiva de tiempo, el manejo de estrés o el liderazgo, son importantísimas para los trabajos del presente, para las carreras del futuro, y por lo tanto para el desarrollo académico de cualquier estudiante de México y el mundo.

No sólo el desempeño en las escuelas mejora debido a ellas, de igual manera hará mucho más fácil su progreso y adaptación a nuevos ambientes y formas de estudio.

Como ves, las habilidades blandas son necesarias y centrarse en dominarlas es tan importante como complementar tus estudios es nuestra universidad.  Domina las soft skills más demandadas y junto a una preparación profesional conseguirás el trabajo de tus sueños.

Autor: Universidad Tominaga Nakamoto

Fuente: Universidad Tominaga Nakamoto

Trabajos esenciales

0

A lo largo de los meses de confinamiento pudimos solicitar comida, víveres y todo tipo de bienes a través de aplicaciones ante la necesidad de refugiarnos en casa.

De pronto, nos dimos cuenta en todo el mundo que muchos trabajos son esenciales y simplemente no lo habíamos visto porque no teníamos las condiciones de emergencia necesarias para que se hicieran visibles. Una de las pocas buenas noticias que podría haber traído la pandemia por la que todavía atravesamos.

Esta semana, recibimos una evidencia más con la crisis de distribución de combustibles en Inglaterra. Fuera de la espectacularidad noticiosa que puede arrojar la desesperación de muchos conductores después de pasar horas en fila para llenar el tanque del automóvil, el problema está en la falta de conductores de camiones, las restricciones de contratación de éstos provenientes de otros países por el Brexit y una demanda que no es atendida por trabajadores locales debido a los sueldos y prestaciones que se ponen en la mesa.

No es el único ejemplo. A lo largo de los meses de confinamiento pudimos solicitar comida, víveres y todo tipo de bienes a través de aplicaciones y servicios de reparto que explotaron gracias a la necesidad de refugiarnos en casa; sin embargo, es probable que nos preguntáramos poco acerca de las condiciones de vida que tienen aquellos que nos llevan medicinas o refrigerios a la puerta y de quienes mantuvieron los estantes llenos de mercancías y abastecieron puntualmente de frutas y verduras los supermercados.

A veces podemos perder la noción sobre la manera en que se produce lo que consumimos y cuántas personas están involucradas en el proceso. Desde agricultores, que buscan aprovechar al máximo las condiciones del clima con nuevas tecnologías y prácticas de aprovechamiento de siembra, a miles de recolectores que acuden cada temporada o están constantemente cosechando los alimentos que disfrutamos.

Luego están aquellos que los cocinan y no pararon durante estos meses en establecimientos que lograron sobrevivir al cierre de actividades preparando órdenes que fueron solicitadas por medio de una App. Finalmente, se sumaron otros miles de repartidores que tomaron las calles en autos, motos y bicicletas para entregar a tiempo los pedidos.

¿Qué ocurre cuando no contamos con suficientes personas interesadas en desempeñar alguno de estos trabajos? Bueno, por lo general sucede lo que vimos en el Reino Unido; antes podía resolverse sabiendo que había una oferta suficiente de mano de obra, pero eso está cambiando aceleradamente en sectores que son básicos para el transporte y entrega de mercancías. Y no sólo ahí, también en puestos corporativos, de atención al cliente y en los propios mostradores.

Durante décadas los economistas han estudiado el comportamiento de los mercados de trabajo a partir de varios criterios, uno de ellos la especialización. Modelos económicos, como el nuestro, avanzaron a partir de ofrecer esa mano de obra que podía cumplir con la calidad que muchas empresas globales necesitaban para ensamblar y maquilar sus productos en diferentes etapas solo que a bajo costo.

Fue tan exitoso en términos generales, que economías asiáticas se sumaron a la competencia para producir más por menos aprovechando el bono demográfico del que aún disponen. Creó, por otro lado, movimientos político-económicos para evitar que compañías nacionales trasladaran sus operaciones a otros países por el costo que significaba quedarse en el suyo. No hace mucho que gobiernos fueron electos por la promesa de recuperar las fábricas y los trabajos perdidos para restaurar la gloria que una vez tuvo su planta productiva nacional.

La crisis sanitaria mundial ha hecho que debamos repensar la manera en que se mide la productividad tanto como las habilidades que demandan muchas funciones que no son básicas, sino indispensables en una economía abierta y competitiva.

Millones de trabajadores en estos momentos manifiestan no estar dispuestos a regresar a un cubículo, sin importar los incentivos que les ofrezcan. Eso impactará en negocios, servicios y mercados completos que dependían de que llegaran todos los días a trabajar.

Como ciudadanos, podemos reflexionar un momento acerca de todo lo que se pone en movimiento cuando estamos en posibilidades de adquirir cualquier cosa y lo que significa que la economía del mundo sea más equilibrada con cada uno de los actores que interviene para que podamos disfrutar de lo que compramos mientras seguimos parcialmente en casa. Será el inicio para construir un sistema más equilibrado.

El autor es director general de Seguridad Privada de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana.

Autor: Luis Wertman Zaslav

Fuente: El Financiero

Seguridad digital

0

A la par de darnos cuenta cuánto dependemos de las redes sociales y del intercambio de todo tipo de información por medio de las aplicaciones de mensajería instantánea, es posible que también tomáramos consciencia de los riesgos que corremos en términos de seguridad digital mientras duró la caída de varias de estas herramientas esta semana.

Una parte significativa de las organizaciones delincuenciales se ha trasladado por completo a operaciones cibernéticas no sólo para organizar ataques que pueden significar secuestros virtuales de bases de datos y servidores, sino para llevar a cabo una amplia variedad de crímenes robando claves de acceso, información personal y suplantando identidades para hacer transacciones de manera remota.

Durante las seis horas en que estas Apps quedaron desconectadas el mundo virtual, era previsible que los delincuentes de la red empezaran a diseñar velozmente esquemas de engaño y fraude para sorprender por medio de correos electrónicos, mensajes en apariencia de protección que provenían de empresas de servicios o el envío de virus que pudieran confundirse con medidas de reinicio en equipos de cómputo y celulares.

Si la información cotidiana que compartimos cada vez tiene más valor para marcas de bienes de consumo, los datos que permiten el acceso a cuentas bancarias, documentación oficial y hasta a los servidores de la empresa para la que trabajas se convierte en una de las propiedades con mayor demanda entre los cibercriminales.

No habíamos terminado de reírnos y de padecer la caída de esas redes cuando ya circulaban algunos reportes sobre mensajes que buscaban contar con información de acceso de usuarios o cualquier otro indicio que abriera la puerta a cometer actos ilegales en medio de la confusión.

Uno de los principios de prevención digital es nunca responder a una solicitud de contraseñas, provenga de donde provenga. Las empresas que nos brindan servicios envían mensajes constantes aclarando que ellas no hacen este tipo de peticiones. Así como no le abrimos la puerta de nuestro hogar a ningún extraño, debemos actuar de la misma manera con quienes intenten acceder a nuestra vida virtual.

Otra recomendación útil es tampoco compartir nuestro número de teléfono celular. Las bandas de extorsionadores telefónicos, por ejemplo, navegan por internet y aprovechan cualquier oportunidad para enlazar este delito con llamadas que simulan la intervención de grupos criminales de alto perfil. Todo puede empezar con una llamada de “exploración” sobre una oferta o promoción, después de tener el número vía correo, para segundos después iniciar con las amenazas y la demanda de dinero depositado en alguna cuenta que se usa para este fin.

Si algo suena sospechoso es probable que lo sea y por ello es importante verificar cualquier mensaje, correo o imagen que pida información con aquella institución que la pide, pero no a los números que pueden contener estos envíos, sino a la fuente directa del bien o servicio que tenemos contratado.

Prácticamente todas las compañías que brindan servicios de comunicación, entretenimiento y telefonía cuentan con centros de contacto que son fáciles de ubicar, lo mismo que la sucursal del banco de nuestra preferencia. Comprobar es prevenir y la prevención es la mejor seguridad.

Estar comunicados es un ejercicio de naturaleza humana. Somos una especie que convive y le da sentido a su existencia a través de interactuar con otros con quienes coincide y colabora. La tecnología ha hecho que ese aspecto crezca de manera exponencial, pero también ha creado nuevos riesgos que debemos atender para no ser víctimas de un delito que será virtual, aunque su daño será bastante real. Adaptémonos y en caso de saber o ver algo, denunciemos al 911 o al 088.

Autor: Luis Wertman Zaslav

Fuente: Publimetro

Deporte, éxito y ansiedad

0

Si hay una imagen que todos compartimos sobre los atletas de alto rendimiento es la del éxito a partir de la tenacidad, el sacrificio y un enorme talento en sus disciplinas. Las historias sobre ellas y ellos nos cautivan precisamente porque superan adversidades que no son comunes y nos entregan hazañas que parecen imposibles.

Hace poco la Agencia Mundial Antidopaje (WADA por sus siglas en inglés) declaró a un diario deportivo nacional que no hay una prohibición en deportistas de élite para usar muchos de los medicamentos con los que se tratan diferentes padecimientos de salud mental. El solo hecho de que una o uno de ellos pudiera estar en una situación de necesidad de esas medicinas y tratamientos siempre es una noticia mundial.

El caso más reciente fue la formidable gimnasta Simone Biles, pero antes ya había ocurrido con la tenista profesional, candidata a ser la número uno del mundo, Naomi Osaka, y antes hubieron muchos otros casos, entre ellos el de Michael Phelps, tal vez el nadador más exitoso de la historia.

El deporte profesional y amateur es una de nuestras grandes aficiones en todo el planeta. Hacer ejercicio es un hábito indispensable para tener una buena salud física y mental, pero tener como referencia al ídolo del momento ayuda mucho a mantener rutinas y objetivos.

Además, es una forma de entretenimiento que nos hace coincidir como pocas actividades colectivas. Podríamos discrepar en una batería de temas, pero en el momento que llega la coincidencia en aficiones, equipos, jugadores y deportes, somos más propensos a ponernos de acuerdo e incluso a compartir con aquellos que son rivales.

Las Olimpiadas, incluyendo las que acaban de pasar en medio de la pandemia, siguen convocando a millones de personas que están al pendiente de las medallas, los récords y las historias de superación que cada cuatro años se repiten con intensidad en la justa internacional.

Se ha dicho que las competencias deportivas funcionan como una manera de resolver conflictos que no podrían solucionarse de otra forma o se harían de una manera mucho menos agradable. Que sus representantes pudieran presentar padecimientos de salud mental sigue siendo una sorpresa general.

No lo es. Una persona que aparentemente lo tiene todo, fama, prestigio, reconocimiento y capacidad económica puede sufrir de un padecimiento mental en cualquier instante. Está comprobado científicamente que la relación entre éxito social y paz interna no es automática.

Las y los atletas de alto rendimiento pagan un precio muy elevado para destacar. Millones de jóvenes compiten alrededor del mundo en disciplinas deportivas y un porcentaje amplio lo hace con la mira puesta en convertirse en un campeón. Como es de esperarse, la mayoría no lo consigue y eso incrementa la presión para quienes tienen esa mezcla de talento, compromiso, condición física y dedicación que supera a los demás, por mucho al promedio.

Si pensamos que esta época es la que acabó con nuestra intimidad gracias a las redes sociales y a las cámaras en los teléfonos celulares, consideremos a mujeres y hombres que de pronto son vigilados constantemente porque son atletas destacados.

La línea entre la victoria y la derrota es delgada, depende de factores que no están bajo el control de los competidores y son un riesgo latente para un deportista competitivo. No obstante, los medimos por los resultados que obtienen y el mínimo es, erróneamente, el triunfo.

Tal vez como aficionados y como miembros de una sociedad solidaria podríamos modificar esta exigencia y regresar a la idea original de que lo importante es la competencia, una en la que los participantes y quienes los apoyamos con nuestras porras pongamos atención en preservar la salud mental por encima de marcas, metas y número de anotaciones. Podría hacer todavía más humano al deporte y quitarle presión a los deportistas que nos cautivan.

Autor: Luis Wertman Zaslav

Fotografía: Simone Biles, gimnasta estadounidense (Getty Images)

Fuente: Publimetro

Hagamos comunidad

0

Nuestros intereses pueden variar, pero nuestras necesidades como ciudadanos tienden a coincidir en la mayoría de los casos. Todas y todos queremos vivir en paz, tranquilos, en entornos seguros y de respeto, con infraestructura y servicios públicos que sean funcionales y se encuentren en buen estado.

Sin embargo, lograr sociedades que estén pendientes de esos satisfactores e incluyan a la mayoría de sus integrantes en esas condiciones de vida se ha convertido en el reto más grande que enfrentamos, uno incluso superior al de la pandemia en la que seguimos.

Por un lado, los valores y principios a los que aspiramos no encuentran mucho contexto en la realidad en la que tenemos que vivir todos los días. Sabemos cómo debemos comportarnos para marcar una diferencia; no obstante, preferimos que alguien más corra con el trabajo y el esfuerzo de hacerlo. 

Las responsabilidades civiles básicas quedan, creo, bastante claras: están en nuestras manos cuidar los recursos naturales de nuestras comunidades, hacer un uso racional de aquellos que contratamos para el hogar (agua, gas, electricidad), pagarlos al igual que los impuestos, conducir de manera responsable un auto, denunciar si vemos o sabemos de algún delito que se cometa, entre otros.

Supervisar que vivamos en espacios bien iluminados, limpios, con una buena comunicación vecinal también entra en lo que podemos considerar como corresponsabilidad. Tristemente, a pesar de que juega a nuestro favor, dejamos de participar en la posible solución de los problemas y pensamos que será la presión de otros la que impulse las mejoras que buscamos.  

Muchas normas que no se siguen hacen que las pocas que pueden funcionar no tengan ninguna atención. Pocas reglas, respaldadas por la mayoría, hacen que la convivencia sea sencilla, armónica y agregue detalles simples, aunque poderosos, que las adapta a lo largo del tiempo. 

Recientemente me preguntaron si tenía algunas recomendaciones de prevención para una familia que salía de vacaciones por primera vez en casi dos años. Habían pasado por el confinamiento forzoso y la espera de la vacunación, por lo que les urgían unos días fuera de casa.

Respondí con dos de mis sugerencias, probadas durante varios años de experiencia al frente de una organización civil especializada en atender víctimas del delito: avisa a tus vecinos que van a salir, dales tu teléfono en caso de emergencia y entrega un juego de llaves a algún familiar o amigo cercano, si te sientes más cómodo, para que verifique en tu ausencia que tu hogar se encuentra bien. Mi sorpresa fue que el solicitante de las recomendaciones consideró que eran demasiado arriesgadas y me preguntó si no habría manera solo de dejar una luz encendida para tratar de engañar a quien tuviera intención de entrar mientras estaban lejos.

Expliqué que ese truco, popular entre nuestros padres y abuelos, ya no funciona y tiene el efecto contrario al alertar a quien pretende dañarnos de que no hay nadie en casa. También le compartí que era mejor no subir sus ubicaciones a redes sociales y tampoco compartir fotos hasta que regresaran.

Esto último le pareció más escandaloso todavía, porque era tanto como dejar de disfrutar las vacaciones y evitar compartirlas con quienes entra en contacto en sus redes sociales.

Hacer comunidad es confiar en las personas que están a nuestro alrededor, conocerlas y considerarlas parte de nuestras preocupaciones cotidianas. Una de las razones por las que sentimos que no estamos seguros es precisamente porque no podemos distinguir a quien nos ayuda de quien nos quiere perjudicar y eso sólo se consigue entrando en contacto con las personas.

La prevención comienza con medidas que se basan en la colaboración y poco tienen que ver las atribuciones que tienen las autoridades para cuidarnos. Claro que es importante contar con el número de la policía, los bomberos o el servicio de ambulancias, lo que resalto es que es mucho más efectivo estar bien organizados. 

Cualquier grupo dedicado a cometer un delito, no importa mucho el número de integrantes o su experiencia en alguna conducta antisocial, identifica primero las fallas de coordinación que existen, digamos, en una calle o en un edificio. Son puntos débiles que facilitan su tarea y aseguran impunidad. ¿Cuántos de esos puntos podemos identificar en donde vivimos y qué hacemos entre todos para erradicarlos? Responder esa pregunta nos puede dejar claro si estamos haciendo comunidad o no. Hay muchos más y estaremos compartiéndolos en las siguientes colaboraciones.  

Autor: Luis Wertman Zaslav

Fuente: Excélsior

Por qué visitar la isla de Cozumel

Cozumel es una isla del este de México conocida principalmente por sus playas, buceo y compras, con una ciudad principal llamada San Miguel. Es el cuarto puerto de cruceros más activo del mundo (por pasajeros), con diversas líneas de cruceros que ofrecen paradas en este paradisíaco destino de playa del Caribe Mexicano.

La Isla Cozumel se encuentra en los trópicos, por lo que el clima es cálido durante todo el año, pero también es muy húmedo. Los meses de noviembre a marzo son templados y agradables, lo que significa condiciones ideales para estar al aire libre. Estos son los mejores meses para ver zonas arqueológicas mayas y caminar por las distintas zonas de la isla.

El resto de los meses del año, tanto las temperaturas como los niveles de humedad son altos, lo que los convierte en un momento ideal para nadar y bucear. De junio a octubre es la temporada de huracanes en el Caribe, lo que significa que la temporada de lluvias llega a Cozumel.

Atracciones en Cozumel

Dado que hay tantas cosas que hacer en isla Cozumel y la ínsula es tan pequeña, se debe considerar realizar múltiples actividades durante un día.

Quizás ninguna actividad es más popular en Cozumel que ir a la playa. Actividades como la natación, el esnórquel y el buceo son opciones muy populares.

Hay muchas playas en Cozumel para considerar. Si se quiere nadar, el lado oeste de la isla es perfecto, mientras que el lado este es demasiado accidentado para nadar y en general es bastante rural y no tan desarrollado. A su vez, algunas de las playas más populares son Playa Paraíso, Playa Palancar y Playa Mia.

Cozumel se convirtió en un destino turístico en la década de 1960, cuando Jacques Cousteau mencionó la zona como un gran lugar para el buceo. Desde entonces, es considerado uno de los mejores lugares del planeta para bucear; en especial, el Parque Nacional Marino Arrecifes se hizo muy popular e incluye los arrecifes Palancar, Columbia y Paradise, así como la Garganta del Diablo en Punta Sur y el naufragio de Felipe Xicoténcatl.

Hay muchas otras cosas para ver y hacer en Cozumel, como visitar el famoso Parque Chankanaab, pasar el día en Parque Punta Sur o aventurarse a tierra firme para explorar Playa del Carmen o inclusive visitar Cancún.

El parque Xcaret, también en tierra firme, es una visita a no dejar pasar ya que cuenta con una infinidad de actividades, ya sea de día o de noche, para ver y conocer ríos subterráneos, un tradicional pueblo maya, playas, delfinarios y espectáculos tradicionales.

Compras en Cozumel

Una opción simple y divertida es ir al centro de San Miguel para examinar las numerosas tiendas de la pequeña ciudad. Ir de compras en el centro de Cozumel es una bonita experiencia que brinda la oportunidad de adquirir algunos productos mexicanos auténticos.

La vía principal, Av. General Rafael E Melgar, corre a lo largo del océano y es donde se realizan la mayor parte de las compras.

En general, las tiendas turísticas suelen estar más cerca del mar y a medida que se aleja del océano, las oportunidades de compras se vuelven más auténticas y se amplían considerablemente en variedad.

Cozumel es conocida por sus joyas, artesanías mexicanas, artículos de cuero y muchos recuerdos turísticos (camisetas, toallas, bolsos). También se puede encontrar vainilla mexicana y tequila, así como una gran selección de perfumes, joyería y relojes importados de renombradas marcas de alta gama. 

Gastronomía en Cozumel

Hay variadas opciones para comer en toda la isla de Cozumel. Hay cadenas de restaurantes familiares, así como restaurantes locales que sirven cocina mexicana tradicional.

Como se podría imaginar, los restaurantes de Cozumel ofrecen principalmente cocina mexicana, aunque hay una gran cantidad de comida Tex-Mex y algunos lugares para degustar de comida yucateca. También hay una buena variedad de restaurantes de mariscos que sirven platillos a base de frescos productos del mar.

Nuevos Barrios

0

Pronto veremos qué tanto ha cambiado nuestra capital cuando retornemos a una nueva realidad que ha modificado la relación con los espacios que destinamos para el trabajo, la convivencia y el tiempo que dedicamos a trasladarnos de un lugar a otro.

Recientemente puede leer algunos de los estudios que se han hecho para replantear cómo deben diseñarse las ciudades en los próximos años para que el tráfico, la contaminación que acarrea, y el desgaste de pasar horas en el transporte público o privado sean costumbres del pasado y empecemos a encontrar una vida de cercanías, de barrio, similar a la que nuestros abuelos contaban que existía a principios del siglo XX.

Vivimos en una metrópoli de casi nueve millones de residentes y unos siete más que arribaban todos los días por trabajo, comercio, educación, entre otros motivos que mueven a miles de personas a acudir a una urbe. El espacio, los servicios y las posibilidades de desarrollo se han visto limitadas porque hablamos de una población flotante casi igual a la que habita en ella.

Sin embargo, las distancias en el núcleo donde se encuentran los centros de trabajo más populares, localizados entre las Alcaldías Cuauhtémoc, Miguel Hidalgo, Azcapotzalco y una buena parte de Benito Juárez, no son tan amplias y podrían cubrirse en bicicleta o motoneta, por poner dos ejemplos.

Conocidos por muchos usuarios del transporte, los biciestacionamientos son instalaciones muy populares en regiones que conectan con el Estado de México a la Ciudad de México, los cuales permiten que se hagan conexiones a edificios y establecimientos comerciales donde se encuentran los puestos de trabajo, una vez que se utilizó alguna ruta o medio de transporte público. Es decir, hemos adoptado en muchos puntos el hábito de movernos en distancias cortas sin automóvil.

¿Qué pasaría si no tuviéramos que hacerlo del todo y los satisfactores se encontraran cerca de nuestra casa? Puede que parezca un sueño, pero si algo traerá esta crisis sanitaria es la posibilidad de repensar la forma en que se evalúa el desempeño, la productividad y la necesidad de concentrarnos en zonas llamadas “corporativas” para quedarnos en el hogar la mayor parte de la semana.

Reducir el parque vehicular que se desplaza por calles y avenidas en un, digamos, 30 por ciento, nos ubicaría en una capital que no hemos visto en treinta años y ese flujo de automóviles haría que la calidad de vida de los citadinos y de esa población flotante cambiara de la noche a la mañana.

Además, debemos tomar en cuenta las ampliaciones de rutas de transporte público y los tipos que se han sumado para ofrecer alternativas de movilidad en alcaldías que solo podían trasladar a sus habitantes por vía terrestre o subterránea.

El Metro, el Metrobús, el nuevo Cablebus, el Tren Suburbano son medios de movilidad que tienes que crecer de la mano de un respaldo social para cuidarlos y usarlos en lugar de los autos particulares. Complementariamente, las bicicletas, en su modalidad mecánica y eléctrica, sumada a una buena regulación de las motocicletas y motonetas, mejorarían definitivamente la calidad de vida de millones de personas.

Si eso lo trasladamos a nuevos barrios que generen oferta y demanda de bienes y servicios cercanos, comunitarios, donde los mismos vecinos puedan emplearse o trabajar vía remota mientras consumen en su lugar de residencia, hablamos de regiones completas que podrían resurgir y dejar de ser dormitorios o espacios de convivencia de fin de semana.

Nuevos barrios, nuevas ciudades, para nuevos ciudadanos que tendrían rutinas distintas a las que vivimos durante las últimas tres o cuatro décadas, en donde la norma era pasar dos, tres o hasta cuatro horas para llegar y regresar del trabajo. Ese modelo no mejora las condiciones de vida, tener el mayor número de satisfactores a la mano, sí.

Autor: Luis Wertman Zaslav

Fuente: La Prensa