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Los 5 mercados gourmet de la CDMX que debes de conocer

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  • Si algo caracteriza a la Ciudad de México es su amplia oferta gastronómica.

Sobra dónde comer bien: desde los mejores restaurantes hasta los puestos callejeros. Pero hay una alternativa que cada vez cobra más popularidad entre los amantes de la buena mesa: los mercados gourmet. Cada uno tiene su propio sabor y ambiente, resultado del tipo de gente que impera en la zona, del estilo del lugar y, sobre todo, de la originalidad de su comida. En ellos no vas a encontrar franquicias de comida rápida, solo platillos originales elaborados con insumos de la mejor calidad.

Te invitamos a recorrer los cinco mejores mercados gourmet de la capital.

  • Mercado Roma

Arrancamos nuestro recorrido en el Mercado Roma porque es el que abre más temprano. Siendo sábado, a las nueve de la mañana apenas empezaban a cobrar vida los locales, unos antes que otros, mientras que al fondo, en los largos tablones de madera junto a la terraza, se iban acomodando los madrugadores para disfrutar un capuchino, un americano o un exprés cortado. Compartir una larga mesa permite que te sientas lo suficientemente solo y lo suficientemente acompañado a la vez.

Desde que entras a este mercado te topas con un puesto tras otro; la verdad es que están algo apretujados, lo cual es más notorio a la hora de la comida que por la mañana. Por un momento sentí que estaba adentro de una colmena, ya que los laberínticos pasillos, cuyo piso de mosaicos simula las cavidades de un panal, te llevan entre las barras de los puestos con forma de prisma, en los que se ofrecen antojitos mexicanos y todo tipo de viandas.

  • Marché Dumas

De la Roma nos dirigimos al corazón de Polanco, pues precisamente en la calle Alejandro Dumas se encuentra una acogedora casita con sabor afrancesado, cuyo ambiente resulta a la vez refinado y distendido. Alberga exquisiteces en cada rincón: desde repostería fina para acompañar un buen café, hasta pizzas orgánicas, un Cheese Club, platillos catalanes elaborados con ingredientes típicos de la región, marquesitas yucatecas y otros manjares que difícilmente encuentras en otro lado. También cuenta con una excelente selección de vinos y cervezas de todo el mundo.

Definitivamente, Marché Dumas es un espacio pensado por los amantes del buen comer, por lo que aprovechamos esta segunda parada para desayunar a cuerpo de rey en la cálida terraza.

  • Mercado Moliere

De los cinco mercados gourmet que visitamos en nuestro recorrido, me parece que Mercado Moliere es el que tiene la infraestructura más parecida a los mercados tradicionales de la Ciudad de México: una gran nave de dos aguas, con el frente abierto a la calle, en cuyos pasillos se encuentran distribuidos varios locales que ofrecen una basta y original variedad gastronómica. Ahora mismo, mientras reviso las fotografías de los platillos al escribir esta crónica, se me ha despertado el apetito… Debo mencionar que este mercado, ubicado en el nuevo Polanco, es un referente para los amantes de la cerveza artesanal y el buen vino, que se pueden disfrutar en la espectacular terraza. Una parada obligada después de visitar el museo Soumaya.

  • Mercado del Carmen, San Ángel

Cuando llegamos al Mercado del Carmen pasado el mediodía ya estaba a reventar, sobre todo de turistas. Alojado dentro de una casona cuya inconfundible fachada está pintada de azul pastel, este mercado se distribuye en dos pisos que albergan más de 25 locales. El moderno diseño interior contrasta con la arquitectura colonial del edificio, que está rodeado de hermosas plazas y parques llenos de arte e historia.

Aunque también podrás encontrar ropa, artesanías, curiosidades y música, el principal objetivo de este mercado es generar un ambiente de cultura gastronómica de alta calidad con una gran variedad de alimentos cuidadosamente seleccionados para seducir el paladar: desde postres veganos, malteadas, productos orgánicos, postres típicos yucatecos, hasta teacakes y scones ingleses; no olvides subir al segundo piso, donde está una casa de té decorada en estilo shabby chic, ideal para cargar las pilas antes de proseguir a nuestra última parada.

  • Mercado del Carmen, Coyoacán

Antes de finalizar nuestro recorrido gastronómico dimos una vuelta por Coyoacán, cuyo centro ha sido por muchos años lugar de reunión y refugio de artistas, filósofos, escritores, hippies y aristócratas. Sus calles están llenas de historias porque su constitución se teje junto con la edificación de la Ciudad de México. En la calle de Malitzin se encuentra este nuevo centro gourmet: Mercado del Carmen Coyoacán; sí, de los mismos creadores del que está en San Ángel.

El edificio es estilo minimalista, muy contemporáneo y acogedor. Al entrar descubrirás una amplia variedad de comida mexicana, rusa, española, oriental y vegetariana, así como mariscos, postres, tapas y pizzas. Entre los principales atractivos está una heladería con sabores mexicanos, como mango con flor de cempasúchil, limón con chía, dxuladi (cacao puro) y cacapote (cascara de cacao con ajonjolí negro). Sus más de veinte locales están repartidos alrededor de mesas comunales en las que pueden sentarse hasta 200 personas. También puedes curiosear en las tiendas de accesorios o darte una vuelta por la barbería que está en la parte superior, que cuenta con una espectacular vista del mercado.

Queso Cotija, denominación de origen

Queso Cotija

Denominación de Origen

Dr. Miguel Ángel Cevallos | Investigador del Centro de Ciencias Genómicas, UNAM

Me resulta especialmente gratificante toparme con proyectos de investigación en los que se conjugan la originalidad con las tecnologías de punta y el compromiso social con el afán de resolver cosas prácticas. Uno de estos proyectos lo desarrollan dos instituciones de la UNAM, la Facultad de Química (FQ) y el Instituto de Biotecnología (IBT), con el fin de entender la microbiología que subyace en la manufactura de un excelente queso mexicano, el queso Cotija, y así contribuir a que los artesanos que elaboran este producto puedan obtener una etiqueta muy codiciada, la de Denominación de origen (DO) ya que este reconocimiento evitaría que otros artesanos o industrias utilicen el nombre “Cotija” para identificar sus productos.

Hace unos años el verdadero queso Cotija estuvo a punto de desaparecer. Por fortuna, un puñado de académicos, de artesanos y un presidente municipal rescataron a este lácteo del borde de la extinción y lo convirtieron en un producto merecedor de un galardón internacional y que cuenta desde hace 10 años con una Marca Colectiva Región de Origen que permite distinguir el artículo original de las malas imitaciones o de las versiones industrializadas. Tristemente, hoy en día, este apreciado queso está nuevamente en peligro de extinguirse por diversos problemas que iré deshilvanando a lo largo de este escrito.

El terruño, la calidad y la cultura

La DO es una etiqueta que solo se otorga a aquellos productos arraigados cultural y territorialmente, de calidad excelsa, que se confeccionan con métodos tradicionales, con materias primas locales, en zonas geográficas claramente delimitadas. Los artículos con esta etiqueta deben cumplir no solo con una norma que los estandarice, sino que garantice un producto de alta calidad, seguro de consumir y que tenga las cualidades que la tradición marca y que el consumidor desea. En México, quien concede esta etiqueta es el Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial (IMPI). Los pocos productos mexicanos que gozan de la DO cuentan con la protección de nuestro gobierno y el respeto del mundo entero, ya que nuestro país ha firmado varios tratados internacionales en los cuales se compromete a respetar los productos con DO de otros países, y asegura que los otros firmantes de estos tratados procedan del mismo modo con los nuestros (ver cuadro 1).

La DO brinda muchas ventajas a quienes la poseen, pero al mismo tiempo les impone infinidad de obligaciones. Antes que nada, instiga a los artesanos a organizarse y a especificar entre ellos cuáles son las calidades y características de lo que elaboran, requisito obvio para poder ofrecer un producto apetecible, con propiedades bien definidas y que el consumidor esté dispuesto a adquirir. Con la DO los rancheros tienen acceso a un mercado nacional más amplio e incluso a uno internacional, y con menos intermediarios. Además, esta denominación no sólo los protege de falsificaciones e imitaciones de sus productos, sino que, al ofrecer un alimento “gourmet”, pueden exigir mejores precios e incrementar sensiblemente sus ingresos. Por ello no es de extrañar que desde el final de los años 90 quienes elaboran queso Cotija hayan hecho grandes esfuerzos para conquistar esta otra distinción.

Un poco de historia

El auténtico queso Cotija se produce en algunas rancherías de la sierra de Jalmich, ubicada en Jalisco y Michoacán cuya tradición quesera, como comenta Esteban Barragán López, miembro del Colegio de Michoacán, se remonta a los albores del siglo XVI, con la llegada de los criollos. Con el transcurrir de los años, se generó un queso de muy buena calidad, con personalidad propia, que incluso en el siglo XVII se utilizó para pagar el famoso diezmo que exigía la Iglesia Católica. El queso Cotija fincó su fama en la primera mitad del siglo pasado; sin embargo, luego se hizo tan popular que en otras regiones del país pronto surgieron malas imitaciones que han acabado por malbaratar el producto original. Entre otros muchos factores, la competencia desleal ha causado que quienes lo producen estén desapareciendo poco a poco: de hecho, actualmente sólo unas 200 familias siguen elaborándolo, por lo cual, si queremos que este queso persista, debemos reconocer su valía y pagar a sus productores el precio que merece. La Marca Colectiva Cotija Región de Origen logró rescatar del olvido a este producto y coadyuvó, al menos transitoriamente, a preservar el estilo de vida y la cultura de esa región de México.

El queso Cotija

Las familias que producen el queso Cotija son pobres, a tal grado que muchos de sus miembros han emigrado a las ciudades cercanas o a los Estados Unidos. El queso que fabrican los provee de una valiosa fuente de proteína que suplementa sus alimentos, en la temporada del año en que no hay ordeña de las vacas o que la ordeña es escasa, y les suministra un ingreso adicional cuando el producto se vende a los pueblos vecinos. Este queso se elabora a partir de la leche que en la temporada de lluvias se obtiene de un ganado criollo cruzado con Cebú y otras razas europeas, criado con el fin primario de producir carne y no leche. No obstante, la poca leche que se ordeña es de muy buena calidad. Las vacas comen en los pastizales de la región y no se les ofrece otros suplementos alimenticios, ni se les aplica antibióticos. La materia prima para este queso siempre es leche bronca, es decir sin pasteurizar, que para iniciar el proceso se filtra cuidadosamente a través de un lienzo. La cuajada, es decir la pasta que se obtiene al separar los sólidos de la leche del suero, se hace siempre con cuajo natural de origen animal. Esta pasta se amasa exclusivamente con sal de Coyutlán (Colima), se deposita en moldes recubiertos con lienzos de ixtle o de algodón y se prensa durante uno o dos días. Las piezas permanecen en sus moldes por otros 15 días, hasta que tienen la firmeza deseada. El queso se madura a una temperatura promedio de 18ºC, durante un tiempo que oscila entre los 3 meses y los dos años. Durante la maduración los quesos se cuidan amorosamente: se voltean y su superficie se limpia cada tres días hasta que se forma una corteza sana y homogénea. Los bloques de queso suelen tener entre 20 y 25 kilos, lo cual hace que su peso y su tamaño fuera el ideal para que en antaño los arrieros pudieran transportarlo a lomos de mula.

Primeros pasos

Merced a su energía, su visión y su talento, Esteban Barragán López académico oriundo de la zona y gran conocedor de la problemática local; Patricia Chombo, experta en tecnología de la fabricación del queso y académica del Centro de Investigación y Asistencia en Tecnología y Diseño del Estado de Jalisco, y Rubén Álvarez funcionario del municipio de Cotija durante algunos años, lograron convencer a los productores de queso de que la única manera de que su producto sobreviviera y constituyera el vehículo idóneo para conservar la cultura de la región y que los productores mejoraran sus economías era obtener la DO. Aun cuando su camino ha sido arduo, los obstáculos muchos y los logros cuantiosos, la meta, en el mejor de los casos, todavía está en el horizonte.

Primero inculcaron a los productores de la necesidad de organizarse en un frente común. Por ello se fundó la Asociación Regional de Productores de Queso Cotija (ARPQC), en 2001 y en 2003, la Asociación Civil Prosierra de Jalmich que involucró a los productores, a los académicos, a los organismos públicos y a todos aquellos, que en ese entonces, estaban interesados en el proyecto. Esta asociación les proporcionó a los ejidatarios de la asesoría adecuada y de los contactos necesarios para allanarles el camino hacia el proceso de certificación, la obtención de apoyos oficiales y un sistema de comercialización más adecuado. Sin embargo, esta asociación desapareció como me contó el Dr. Barragán, en 2009: debido a varios factores, entre ellos, el cansancio de Rubén Álvarez, Presidente de la AC y radicado en Cotija, donde le llovían críticas infundadas- y también el de Patricia Chombo e incluso el mío, de que un cierto grupo de productores, manipulados y engañados por un político de Morelia que buscaba montarse al proceso y dirigirlo (sacar a la A.C. de en medio)…Una de las labores más importantes que concretó esta asociación fue estudiar establecer que el queso Cotija es un producto tradicional, con raíces históricas profundas, cuya naturaleza depende no sólo de las personas que lo elaboran y de sus tradiciones, sino también del ambiente biológico que los rodea. Con ello quedó establecido que el queso Cotija únicamente pueden elaborarlo los pobladores de la Sierra de Jalmich, que son los únicos que cuentan con las recetas tradicionales y los ingredientes precisos para hacerlo, requisito esencial para otorgar una DO.

Como suele suceder en todas las confecciones artesanales, el verdadero queso Cotija se elabora siguiendo recetas familiares tradicionales lo cual origina que existan quesos con una extensa gama de sabores. Por esta razón resultaba crucial que los mismos productores –que a final de cuentas, son los mejores jueces del producto-, a través de catas definieran cuáles debían ser las propiedades óptimas de un buen queso Cotija y además que, con total imparcialidad, de entre todas las recetas escogieran la que más los acercara a ese ideal. Ahora bien, dado que cualquier alimento que se quiera ofrecer a un mercado más amplio debe ser seguro de consumir, fue muy importante afinar, con la asesoría de la ya mencionada maestra Chombo cuáles eran los procedimientos idóneos para obtener un queso seguro de consumir y con las cualidades necesarias para que pudiera ofrecerse en un mercado boutique. Desafortunadamente, no basta con tener un producto con buen perfil culinario, también hay que venderlo. Con este propósito y gracias a Rubén Álvarez, desde el año 2000 se realizan ferias del queso Cotija que han ayudado a que este producto se posicione cada vez mejor en el mercado. La calidad del Queso Cotija ha sido reconocida en varios foros nacionales e internacionales. El primero de ellos y el que le dio a este lácteo una dimensión internacional fue el haber merecido, en el 2006, el primer premio al mejor queso extranjero en el Campeonato Mundial de Quesos de Calidad, celebrado en Cremona, Italia. A pesar de todos estos logros, en el 2004, el IMPI le negó la DO a los productores de queso Cotija.

¿Por qué el queso Cotija no ha obtenido la DO?

En el 2003, cuando la ARPQC solicitó la DO, el IMPI se enfrentó por vez primera a los problemas implicados en otorgar la DO a un producto tradicional fermentado. Para empezar, como apunta Barragán, en esos tiempos las normas mexicanas vigentes consideraban que el queso Cotija, tradicionalmente fabricado con leche “bronca”, no era de verdad un queso, sino únicamente una pasta prensada no cocida, porque el término “queso” solo podía aplicarse a los productos fabricados con leche pasteurizada. Además, como me hizo ver el Dr. Barragan: el IMPI consideró que no funcionaría debido a la inexperiencia en la organización formal de los productores, pero sobre todo, creo yo, que su negativa también se debió a la inexperiencia –temor- del propio IMPI, toda vez que no hay en México ninguna DO a un producto alimenticio procesado artesanalmente; también entonces el IMPI estaba impulsando más bien las Marcas Colectivas, bajo el argumento de que eran menos exigentes (lo cual es cierto) y que, a diferencia de una DO, podían ser manejadas por la asociación de productores quienes mantienen la titularidad de la MC, mientras que las DO pasan a ser propiedad del Estado Mexicano.

Otro problema serio fue el enorme volumen de queso tipo Cotija producido por muchas industrias y empresas artesanales, incluso fuera de los estados de Jalisco y Michoacán. Estos quesos tipo Cotija nada tienen que ver con el original. Si el IMPI hubiese otorgado una DO a los productores de la Sierra de Jamlich, todas aquellas empresas que elaboran quesos tipo Cotija ya no podrían emplear esa denominación, y tendrían que venderlo y promocionarlo con otro nombre, menoscabando sus ventas. Esta situación colocó al IMPI en un dilema: o favorecer a las industrias o apoyar a las tradiciones mexicanas; por añadidura, dicho instituto inevitablemente tenía que enfrentarse a hecho de que para poder otorgar un DO a un producto, se necesitaba generar una norma oficial que definiera su calidad y estableciera los mecanismos para evaluarla y certificarla. En los últimos años se han logrado dos avances importantes: primero, ya existe una norma mexicana que define al queso Cotija artesanal madurado y los mecanismos para evaluarlo. Segundo, se creó el Mesón del Queso Cotija que es una institución que, entre otras cosas, funciona como evaluador de la conformidad, es decir determina y certifica quiénes cumplen con la norma.

Dos pasos para adelante y uno hacia atrás

El queso Cotija posee muchas virtudes, pero también padece un defecto frecuente en los productos artesanales: es demasiado heterogéneo. Un poco de variedad, mientras no se salga de lo establecido por la norma mexicana, puede ser incluso benéfico para el consumidor, ya que éste tendría la oportunidad de elegir el queso que más se apegara a su gusto, dentro de la gama de sabores que se ofrece. Sin embargo, el problema se torna grave cuando sólo el 50% de la producción del queso Cotija y el 20% de quienes lo elaboran cumplen con la norma, como lo han señalado el Dr. Champredonde, del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria de Argentina, y el Dr. Cesín-Vargas, de la UNAM. Aún cuando la mayor parte de ese 50% de queso que no cumple con lo que establece la norma, se puede consumir, pero no se puede vender bajo la marca colectiva. Ese queso se vende localmente y a un precio mucho menor del que se obtiene por los que si cumplen la norma. Además, hay cierto porcentaje de quesos manchados por hongos, infestado por los ácaros o contaminado con bacterias patógenas, que no se pueden consumir.

De biotecnólogos y microbiólogos

El sabor y la textura de los quesos madurados no solo depende de la leche que se usa en su manufactura, si no también de las bacterias y de los hongos que actúan en las diferentes etapas de su maduración. Algunos quesos producidos industrialmente como el Brie, el Camembert y el Roquefort, a propósito se inoculan con hongos filamentosos del género Penicillium. A otros quesos, como el Manchego, se les añade cultivos de las bacterias lácticas Lactococcus lactis y Streptococcus thermophilus, con el anhelo de que esos lácteos tengan siempre la misma calidad. En contraste, la maduración del queso Cotija, así como de otros quesos artesanales, depende de las bacterias y de las levaduras que existan en su ambiente, esto es, aquellos que están en los ingredientes y en los instrumentos con que se elaboran o en las manos de los individuos que intervienen en su fabricación.

Identificar cuáles son estos microorganismos es una tarea larga e ingrata. El problema de esta empresa radica en que los microbiólogos sólo somos capaces de crecer en el laboratorio una minúscula porción de las bacterias y hongos que existen en la naturaleza; por esta razón, tenemos que usar herramientas de biología molecular para identificar a los microorganismos que viven en un medio ambiente dado. Algunos investigadores del Centro de Biotecnología Genómica y de la Escuela Nacional de Ciencias Biológicas, ambos del Instituto Politécnico Nacional, han estudiado la microbiología del queso Cotija y determinaron que en él habitan levaduras de los géneros Kluyveromyces, Pichia, Rhodotorula, y Galactomyces, y también bacterias lácticas de los géneros Pediococcus y Lactobacillus Además, comprobaron la presencia de algunas bacterias de los géneros Weissella y Tetragenococcus, que toleran o de plano gustan de los ambientes salados, lo cual no es de extrañar, ya que el queso Cotija contiene una importante cantidad de sal.

La Dra. Maricarmen Quirasco y su alumna Alejandra Escobar (FQ-UNAM), en colaboración con el Dr. Alejandro Sánchez (IBT-UNAM), a fin de resolver de una vez por todas el problema, decidieron aplicar técnicas de metagenómica; acercamiento experimental que consiste en purificar el ADN presente en una muestra ambiental, determinar su secuencia con las nuevas plataformas de secuenciación masiva y con esta información identificar las bacterias que ahí viven y dilucidar qué es lo que hacen. Para ello, la Dra. Quirasco y su equipo colectaron quesos Cotija de la Sierra de Jalmich, aislaron y secuenciaron el ADN ahí presente con un instrumento de última generación llamado Hiseq. Gracias a este esfuerzo colectaron una enorme cantidad de datos que equivaldría a tener la secuencia completa del genoma de 7 personas. Interpretarlos exigió muchas horas de trabajo y el uso de sofisticados programas bioinformáticos. Los resultados fueron asombrosos, ya que se pudieron identificar 574 géneros bacterianos, muchos más de los que se identificaron con otras técnicas. Entre estos géneros, los más importantes fueron Lactobacillus (8 especies), Weissella (2 especies) y Leuconostoc (4 especies). Las bacterias no solo proporcionan sabor al queso, sino como me dijo en entrevista la Dra. Quirasco:…en la microbiota nativa [del queso Cotija] existen microorganismos que producen enzimas con actividad lítica contra patógenos, como Listeria, Staphyloccocus y E. coli, que contribuyen a la inocuidad del producto. Con el análisis de los datos se identificó todos los genes relacionados con la producción de las substancias que le dan su sabor al queso Cotija. Este trabajo será fundamental para implementar un buen control de calidad.

¿Qué falta?

Indudablemente se han hecho grandes avances para conseguir la DO, pero aún quedan muchos problemas que resolver. Uno de ellos es estimar el tamaño óptimo de la producción: si se hace poco queso, se vuelve un insumo tan difícil de conseguir que el consumidor se ve obligado a optar por un sustituto industrial y si se hace demasiado el producto se malbarataría. En este momento los rancheros de la Sierra de Jalmich producen poco queso y los que cumplen con la norma son aún menos. Es fundamental convencer a más rancheros a que se sumen a la producción de queso Cotija, pero que lo hagan siguiendo las recomendaciones de producción y de higiene para lograr no solo un mayor volumen de queso sino que también que éste cumpla con la norma. Hay, también, que encontrar métodos más eficientes para vender el producto: en este momento existen contados proveedores, y el queso sólo se ofrece en pocos establecimientos. Me gustaría afirmar que los problemas de estos artesanos son solo técnicos, pero como subrayó el Dr. Barragán cuando le pregunté que hacía falta para que el IMPI otorgue la DO al queso Cotija: se requiere de LA PRESIÓN POLÍTICA que pudieran ejercer los gobiernos estatales de Jalisco y de Michoacán; pero detrás de ellos, para que eso pueda ocurrir, creo que se requiere reactivar un equipo transdisciplinario e interintitucional -como lo fue Pro Sierra de Jalmich- capaz de orientar nuevamente el proceso de patrimonialización, realizar las gestiones necesarias, reanimar y reorganizar a los productores.

los 27 quesos más deliciosos de la Tierra

Uno de los mayores placeres gastronómicos que conozco es el queso, todavía no he encontrado una variedad que no me guste, sea suave o fuerte, cremoso o duro, acompañado con un vino adecuado es una auténtica delicia. Hoy vamos a repasar cuáles son los 27 quesos más deliciosos de la Tierra, para los más queseros por supuesto, pues hay quien no lo puede ver ni en pintura.

La base de todo queso es la leche, sea de vaca, cabra, oveja, búfala, camello u otros mamíferos rumiantes. Hay centenares de variedades de queso, por lo que resulta casi imposible relacionarlas todas. Recordad que aquí podéis aprender a catar un queso con los cinco sentidos. La selección de quesos de hoy es una pequeña muestra, y estaremos encantados de que aportéis vuestro grano de arena y nos digáis cuál es vuestro queso preferido.

Quesos holandeses

1. Gouda

15 Gouda

El queso gouda es originario de la ciudad del mismo nombre y se empezó a producir en el siglo XVII. Tradicionalmente se hace a partir de leche de vaca pasteurizada, aunque algunas variedades utilizan leche de oveja o de cabra para producir quesos que van a ser envejecido durante mucho tiempo.

Hay siete tipos diferentes de queso Gouda, clasificados en función de la edad: Graskaas, Overjarig, Jong, belegen Jong, belegen, belegen extra, y Oud. Cada queso se vuelve cada vez más firme en textura y más rico en sabor que la clasificación anterior. La corteza encerada también cambia según su edad, cuanto más joven más suave y amarilla.

2. Edam

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Edam es un queso semiduro de color amarillo pálido, elaborado con leche de vaca y con un sabor ligeramente amargo y ligeramente salado. Su su origen está en la pequeña ciudad de Edam, a poca distancia de Amsterdam.

Tradicionalmente se hace en forma de bola y su cáscara está teñida de carmín y envuelta en parafina. Se parece al Gouda pero con menos grasa, de pasta compacta, color amarillento y sabor no demasiado fuerte,

3. Maasdam

17 Maasdam

El rasgo más característico de este queso son sus ‘ojos’ o agujeros. Fue creado en la década de 1990 como una alternativa a la más cara de queso suizo Emmental, aunque es más húmedo. Es un queso de alto contenido de grasa, al menos un 45%.

Se madura más rápido que otros quesos holandeses, está preparado de 4 a 12 semanas. Su cáscara exterior es lisa, y está encerada de color amarillo, similar a Gouda. Tiene una textura cremosa y un dulce, crujiente, con un sabor a nuez y un fondo afrutado. Si se comen joven, su sabor es delicioso con un sándwich o como merienda. También se prepara fundido en guisos, sopas o fondues.

Quesos franceses

4. Brie

10 Brie

Brie es el queso francés más conocido y por eso se le apoda «El rey los quesos». Es un queso de pasta blanda que lleva el nombre de la región francesa de Brie, donde se creó originalmente. Hace varios cientos de años, Brie era uno de los tributos que tenían que ser pagado a los reyes franceses.

Se produce a partir de leche de vaca semidesnatada. El cuajo se añade a la leche cruda y se calienta a una temperatura de 37°C para obtener la cuajada. El queso brie luego se cuela en moldes, varias capas de queso se rellenan en el molde y después se mantiene alrededor de 18 horas. Después de esto, el queso es salado y envejecido durante un mínimo de cuatro semanas.

5. Camembert

11 Camembert

Marie Harel creó el queso camembert original a partir de leche cruda en Normandía, Francia en 1791. Hoy en día, sin embargo, un porcentaje muy pequeño de los productores hacen queso a partir de leche cruda con el mismo proceso que Marie Harel habría utilizado. Muy buenas variedades de queso camembert a base de leche pasteurizada se pueden encontrar en Normandía en la actualidad. El mejor de ellos es el Camembert Le Chatelain.

El queso Camembert fresco es suave, duro y quebradiza en la textura. Cuando es joven tiene un sabor lácteo y dulce. A medida que madura el queso se forma un interior nasal suave y una corteza enmohecida que es típica de este queso. Tiene un sabor rico y mantecoso. La corteza es de color blanco florido causada por un hongo blanco.

6. Roquefort

12 Roquefort

Roquefort es un queso muy popular, se dice que era uno de los favoritos del emperador Carlomagno. En Francia, se le llama el «queso de reyes y papas». Este queso es húmedo y se rompe en pequeños pedazos fácilmente, de sabor fuerte y salado. Su crianza dura unos5 meses. Se utiliza sobre todo en ensaladas y aderezos.

7. Comté

13 Comte

Comté es un queso francés producido con leche de vaca pasteurizada. Es madurado a la perfección en la oscuridad de las cuevas especiales en las que el queso debe su sabor único, textura y color. Hay varias bodegas de maduración de la región en Comté y se madura durante un mínimo de 4 meses a 18 o 24 meses.

Considerado uno de los mejores quesos del mundo, una cuña de Comte revela un interior de color amarillo pálido y una textura que puede variar de seda, flácida a cristalina. Los principales sabores aromáticos que perduran en el paladar son un equilibrio de mantequilla y castaña, con un final dulce. Su capacidad para fundir fácilmente hace que vaya bien con muchas recetas.

Quesos turcos

8. Tulum

1 Tulum

Este queso, elaborado tradicionalmente por los pastores para hacer acopio de reservas durante el invierno, se deja madurar envuelto en piel de cabra o tulum, de ahí su nombre. En Turquía, existen más de diez variedades de quesos tulum, pero dos son las más conocidos: el Izmir tulum, que recibe el nombre de su región de producción, Esmirna, en la costa egea, y el Erzincan, en la península de Anatolia, al este del país.

Tradicionalmente, se elabora con leche cruda de oveja que se pone a madurar en bolsas elaboradas con piel de cabra (denominadas tulum), donde puede permanecer de 3 meses hasta 2 años, y donde desarrolla su intenso aroma y fuerte sabor. Actualmente en algunos lugares, las bolsas de plástico han sustituido a los tradicionales “tulum”; los estudiosos no se han puesto de acuerdo sobre si esto afecta o no a las características de este queso.

Es un queso graso y tiene una masa húmeda, granulosa y fácilmente quebradiza. El Izmir tulum es algo más duro y salado que el de Erzincan, pero ambos huelen a heno y a hierbas, y su sabor es salado, algo especiado y recuerda ligeramente a frutos secos. Es un queso sin corteza, de pasta blanca marfileña, suave y desmenuzable. Es un buen sustituto del queso Feta en ensaladas.

Quesos suizos

9. Gruyère

18 Gruyere

El nombre de este queso es el de un pueblo suizo. Su corteza de color marrón oxidado natural es dura, seca y con agujeros minúsculos. El queso es amarillo más oscuro que el Emmental, pero la textura es más densa y compacta, ligeramente granulada. Su sabor es complejo, en un primer momento sabe a fruta, más tarde a nuez.

Para hacer Gruyere, la leche cruda se calienta y se añade el cuajo líquido, la masa resultante se corta en trozos pequeños que se liberan de suero de leche mientras se agitan. Después se prensa en salmuera durante 8 días y se deja madurar durante dos meses a temperatura ambiente.

10. Emmental

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Este queso se produce en los cantones centrales de Suiza. Es un queso tradicional, sin pasteurizar, duro, elaborado con leche de vaca. El aroma es dulce con tonos de heno recién cortado. El sabor es muy afrutado, con un tono de acidez.

El queso Emmental tiene agujeros del tamaño de una nuez. Se considera que es uno de los quesos más difíciles de producir debido a su complicado proceso de fermentación formador de perforación. El queso tiene un sabor delicioso con un vaso de vino.

11. Appenzeller

20 Appenzeller

Hay dos tipos de Appenzeller: el común, hecho con leche descremada y curado durante 12 meses, y el especial, hecho con leche entera y curado en salmuera y pimienta.

El queso se origina en el cantón suizo norte-oriental de la Appenzell cerca de la frontera de Liechtenstein, pero, hoy en día también se hace en el cantón de St. Gallen (que es un sitio de una autoridad especial que protege una ingeniosidad de Appenzell).

Quesos ingleses

12. Cheddar

21 Cheddar

Antiguamente, Inglaterra era el único lugar donde se hacían quesos Cheddar. Sin embargo, hoy en día cualquier fabricante en cualquier rincón del mundo pueden etiquetar el queso producido por él como «cheddar», ya que no está protegido al igual que otros nombres o marcas de queso.

El queso cheddar está hecho de leche de vaca, es un queso de pasta dura y natural que tiene una textura ligeramente quebradiza si está curado y suave si es tierno. A medida que madura, su sabor se va agudizando.

13. Stilton

22 Stilton

Este es uno de los mejores quesos británicos, adecuado no sólo para celebraciones, sino también para animar platos diarios. Es el único queso británico que tiene una marca comercial de certificación y un nombre protegido por la UE. El queso Stilton sólo puede producirse en los tres condados de Derbyshire, Nottinghamshire y Leicestershire.

Se elabora a partir de leche pasteurizada de vacaproducida localmente. La característica distintiva de este queso son venas azules que irradian desde el centro del queso. Tradicionalmente, este queso es ideal para servir con jerez y oporto. También es una buena opción para ir con nueces, galletas saladas, galletas y panes.

Quesos griegos

14. Feta

2 Feta

El queso Feta es sin duda uno de los más famosos quesos griegos, de hecho ocupa el 70% en el consumo de queso griego. Sólo aquellos quesos fabricados en Macedonia, Tracia, Tesalia, Grecia central continental, el Peloponeso y Lesbos se pueden llamar «feta». Para crear un feta tradicional, se mezcla un 30% de leche de cabra con leche de oveja de los animales que pastan en los pastos en la denominación específica de las regiones de origen.

La firmeza, textura y sabor difieren de una región a otra. En general, el Feta es un queso fresco en escabeche que tiene un sabor salado y picante realzado por la solución de salmuera. La textura depende de la edad, puede ser extremadamente cremoso, o desmenuzable seco. Tras la maduración de 2 meses, el feta se comercializa en bloques sumergidos en salmuera.

El queso se puede utilizar como un queso de mesa o usarse en una tradicional ensalada griega, spanakopita, pizza o pastel. Tiene un sabor delicioso, con aceite de oliva, pimientos rojos asados ​​y frutos secos. Si es necesario, se puede lavar con agua para eliminar el sabor saladoextra. El sabor salado del queso Feta pares bien con la cerveza, Pinot Noir, Sauvignon Blanc y Zinfandel.

Quesos argentinos

15. Quesillo

3 Quesillo

El Quesillo es un queso fresco de pasta hilada producido en las zonas rurales el noroeste de Argentina, principalmente en la provincia de Tucumán, aunque también se fabrica en Jujuy, Salta y Catamarca. Su origen se remonta a la conquista española donde se combinaron productos y costumbres europeas y recetas criollas tradicionales.

Posee una textura compacta, firme y ligeramente elástica, de color blanco, blanco-amarillento, o amarillento, de acuerdo con el porcentaje de participación de las leches de vaca y de cabra en las mezclas. De sabor láctico, poco desarrollado y suave, con olor característico, poco perceptible. Se consume fresco con otras comidas o en forma de postre, combinado con dulce de cayote, arrope o con miel de caña.

Quesos italianos

16. Parmesano

5 Parmesano

El queso Parmigiano Reggiano o Parmesano es considerado como uno de los mejores quesos por los entendidos. Para que un queso se denomine como parmesano, tiene que ser producido a partir de vacas que pastan en hierba fresca y heno. Su nombre proviene de las provincias en las que se hace, a saber provincias de Parma, Reggio Emilia, Módena, Bolonia y Mantua.

Este queso tiene una veta radial que dificulta el corte con cuchillo, por eso es mejor partirlo con una herramienta especial de hoja ancha, con lo que se obtienen trozos irregulares. El aroma del Parmesano es inconfundible y posee una multitud de sabores bien definidos: a pasas, fruta seca y vino. El verdadero queso parmesano tiene una textura dura, arenosa y es afrutado y sabe a nuez. En cocina se ralla sobre pastas, sopas y risottos. También se come por sí mismo como un aperitivo.

17. Mozzarella

6 Mozzarella

El queso mozzarella es un queso fresco que se elabora a partir de leche de búfalos que pastan en manada en muy pocos países, como Italia y Bulgaria. Como resultado, la mayoría de los quesos mozzarella disponibles ahora están elaborados con leche de vaca.

Se consume fresco y dentro de pocas horas después de que se hizo, por lo que no envejece como ocurre con otros quesos. Es fácil de hacer en casa y puede usarse en muchas recetas de ensaladas, carnes, mariscos y vegetales.

18. Gorgonzola

7 Gorgonzola

Gorgonzola es uno de los quesos azules más antiguos del mundo. El queso se produce principalmente en las regiones del norte de Italia de Piamonte y Lombardía. Generalmente se tarda de tres a cuatro meses para alcanzar la plena madurez.

Este queso tiene una textura quebradiza y suave con aroma de nuez. Puede tener un leve a fuerte sabor dependiendo de su edad. Gorgonzola Dolce (también llamada Gorgonzola dulce) y gorgonzola Piccante (también llamada Gorgonzola Naturale, gorgonzola Montagna, o Montaña Gorgonzola) son sus dos variedades, las cuales varían en su edad. Se puede consumir de muchas maneras. Se sirve con vinos como Burdeos Blend (rojo), Zinfandel y Sauternes.

19. Mascarpone

8 Mascarpone

El queso mascarpone es originario de la región de Lombardía i se hace cuajando crema de leche con ácido cítrico o ácido acético. Es un queso de pasta blanda, con un alto contenido de grasa, aproximadamente un 75%, por eso es muy adecuado para los pasteles de queso. Su textura varía desde suave, cremoso a mantecoso, dependiendo de cómo se procesa.

Se añade para mejorar el sabor de un plato sin abrumar el sabor original. Sabe estupendo con anchoas, mostaza y especias, o mezclado con cacao o café.** Es ideal para preparar tiramisú o para espesar budines y cremas de postre**. También es popular como postre independiente servido con fruta o jarabe.

20. Provolone

9 Provolone

El queso provolone, a base de leche de vaca, tiene su origen en el sur de Italia. Hoy en día, la mayor producción se lleva a cabo en la región del valle del Po, en particular Lombardía y Veneto. Se clasifica en dos formas: Provolone Dolce, que es envejecido durante 2-3 meses, tiene un color amarillo pálido a blanco y de sabor dulce y Provolone Piccante, que es envejecido durante más de cuatro meses y tiene un sabor más fuerte.

En América del Sur, un queso parecido con el nombre de Provoleta se come con carne a la parrilla. En Estados Unidos, el Provolone que se produce es similar a la variedad Dolce. Los sabores de queso Provolone varían en gran medida dependiendo de dónde se hizo. Contiene altas cantidades de calcio, proteína y sodio. Casa bien con vinos tintos con cuerpo y envejecidos. En la mesa, servirlo con salsas picantes calientes y panes planos.

Quesos chinos

21. Chhurpi

4 Chhurpi

Chhurpi es el queso que se consume principalmente en la región del Himalaya de Nepal y el Tíbet. Existen dos variedades principales de chhurpi: la suave, preparada con de leche de vaca y la dura preparada de leche de yak. El queso Chhurpi se hace mediante la separación de los sólidos de suero de suero de leche para producir leche cuajada similares a la Ricotta italiana, de sabor suave y neutra al gusto, pero que se deja fermentar para adquirir un sabor intenso.

Es una excelente fuente de proteínas y se utiliza como alimento base en la región montañosa. Se come con arroz como alimento básico en las comidas diarias. Después cuajar se cura a temperatura ambiente durante 2-3 días, se corta y se deja secar al sol o en el horno a fuego lento. Este tipo de chhurpi dura muchos años. Cuando alcanza de 4 a 5 años se llama chhurpupu. Si se almacenan adecuadamente en piel de yak, puede ser consumido incluso durante 20 años.

Quesos estadounidenses

22. Monterey Jack

14 Monterey

Su origen se sitúa en los monasterios franciscanos de Monterrey, California, que preparaban un queso suave a partir de leche de vaca que dejaban envejecer durante un pequeño periodo de tiempo. Un empresario estadounidense llamado David Jack se dio cuenta de su valor comercialy comenzó a venderlo en toda California. El queso llegó a ser conocido como «Monterey de Jack» y con el tiempo adquirió su denominación actual.

El queso se utiliza comúnmente en la cocina mexicana y española por su sabor suave y porque se funde muy bien. Es similar en sabor y textura al Cheddar. Las variantes de Monterey Jack, conocidas como Jack seco (versión de edad) y Pepper Jack (pimienta picante) también son muy populares. Monterey Jack está disponible en todas las tiendas de comestibles y supermercados en los Estados Unidos. Es ideal para tomar con vino tinto.

Quesos españoles

23. Cabrales

23 Cabrales

Cabrales es un queso azul graso, elaborado artesanalmente en los picos de Europa, Asturias, concretamente dentro de la región administrativa del Concejo de Cabrales y algunas localidades de la región de Peñamerella Alta. Este queso es una mezcla de leche de vaca, cabra y oveja y madura en cuevas naturales de piedra caliza. Las condiciones frías y húmedas en estas cuevas facilitan el crecimiento de moho Penicillium, lo que le aporta las preciadas vetas de color verde azulado. A diferencia de otros quesos azules inyectados con penicillium, el queso Cabrales cura desde el exterior al interior.

Se caracteriza por su fuerte y penetrante aroma y por su sabor ácido, ligeramente salado. Combina bien con vino tinto, higos frescos, jamón, jerez dulce y embutidos secos. Se usa como base para salsas, para la fusión sobre carnes asadas a la parrilla o para acompañar rebanadas de pan, galletas o frutas. La regulación actual requiere que se venda en un papel de aluminio de color verde oscuro, con el sello de la DOP Queso de Cabrales.

24. Manchego

24 Manchego

El queso manchego se produce en la región de La Mancha, hogar de Don Quijote. Se elabora a partir de leche de oveja pasteurizada o no(según que se produzca en granjas o en industrias). También se rige por las directrices de PDO. La corteza es comestible, y tiene un característico dibujo, con un patrón de espiga de trigo, impreso sobre ella.

Hay diferentes tipos de queso Manchego, en función de su período de envejecimiento: Semi Curado, queso joven que envejece alrededor de 3 meses, con un sabor a frutas, hierba, heno y con una nota picante, Curado, envejecido durante 6 meses, adquiere un sabor a caramelo y nuez, con una ligera acidez y Viejo, cuarado durante un año, con una textura quebradiza y un interior de color caramelo, de sabor dulce y persistente.

25. Mahonés

25 Mahones

El queso mahonés se produce en Mahón, en la isla de Menorca, de ahí su denominación, con leche de vaca. Es un queso de pasta dura, de sabor agudo y salado. Durante su maduración se frota a mano frota con pimentón y aceite.

Se vende a diferentes edades que van desde los 2 meses a los 10 meses. Dos versiones: Mahón Artesano, hecho a partir de leche cruda se envejece durante 2 a 3 meses y su textura es densa y Mahon Reserva, de textura más dura y seca, de sabor más salada.

26. Idiazábal

26 Idiazabal

Este queso se elabora con leche cruda de oveja latxa o de Carranza, en las regiones del norte peninsular. Lleva el nombre del pueblo de Idiazábal y recibió la Denominación de Origen en 1987. En verano, las ovejas pastan en lo alto de las montañas. Durante este tiempo, los fabricantes de queso artesanal las ordeñan, preparan el queso y lo dejan madurar en vigas durante un mínimo de 2 meses. Al final del verano, cuando regresan a las tierras bajas con sus ovejas, el queso ha madurado y está listo para la venta.

Este queso tiene una textura compacta, seca pero no quebradiza y gratamente aceitosa en la boca. La corteza lleva las marcas de los moldes de madera en los que fue drenado. Su característico sabor ahumado es el resultado de haber sido almacenado cerca de chimeneas, con lo que este queso absorbe su humo dulce y aromático. Su sabor es una reminiscencia de caramelo quemado y tocino. Combina bien con vino tinto y sidra.

27. Tetilla

27 Tetilla

Queso típico de Galicia. Desde 1992, ha sido uno de los cuatro quesos que recibieron el reconocimiento DOP. Su nombre describe la forma del queso, un cono en forma de pera. Su color es amarillo pálido y su corteza es muy fina. Su textura es suave, con dispersiones de bolsas de aire, de color marfil, en una boca la sensación es cremosa, ligeramente picante.

La maduración, que se lleva a cabo entre 10 y 30 días, ocurre en el clima caliente y húmedo de Galicia. Combina bien con jerez seco, manzanilla y especialmente albariño o ribeiro.

……..

Quesos mexicanos

Estarán pensando lo mismo que yo… ¿y los quesos mexicanos qué? En el artículo original no pusieron al menos el Cotija, un tipo de queso del estado de Michoacán con denominación de origen que ha sido catalogado como uno de los mejores del mundo. Conoce todo sobre el Cotija aquí:

https://www.revistamira.com.mx/2017/03/07/queso-cotija-den…nacion-de-origen/

 

Fotografías | Mumumío, tomislavmedak, enghey, grongar, rivarslayer, annalibera, adametrnal, paulmorris, Maciej Łebkowski, or Olivier Autissier, Cedric Sam, Sarah&Boston, julia manzerova, FunFearlessFoodie, romantm, eelke dekker, Tolokyo, cskk, Jasper180969, keepps, artizone, bertmb, martindelisle31, jlastras, Haydn Blackey, pinprick, NothingToDeclare y k♥money

Todos somos México (o lo seremos)

CreditRachel Levit

MADRID — América Latina no reacciona. Ya pasó una semana desde que el señor Trump lanzó su ofensiva contra México y no hay respuestas significativas. Los gobiernos de Argentina, Perú y Colombia pronunciaron unas palabras cuidadosas, que aludían al problema sin nombrarlo; solo el boliviano Morales y el ecuatoriano Correa fueron más explícitos. Pero no parece que los países del continente preparen políticas comunes frente a la amenaza.

Es cierto que hay elementos que complican las cosas. México siempre tuvo una relación particular con los Estados Unidos: sus tratos privilegiados por el TLCAN, los 35 millones de mexicanos y estadounidenses de origen mexicano viviendo y trabajando —legales y no tanto— en sus estados, la frontera común. Muchos en Latinoamérica tienen la sensación de que, de tanto mirar al norte, México se fue olvidando del sur. Y, además, ahora mismo tampoco queda claro qué va a hacer el gobierno de Peña Nieto frente al desafío estadounidense.

Pero México, para Estados Unidos, es la expresión más visible y próxima de América Latina. En 1982 la guerra de las Malvinas contra el Reino Unido convenció a la Argentina de que formaba parte de ese espacio; quizá esta ofensiva estadounidense convenza a México de lo mismo. Puede parecer abusivo comparar una guerra con un muro; puede parecerlo menos si se recuerda que, solo desde 2000, más de 6000 personas murieron intentando cruzar esa frontera: seis veces más que en aquella guerra.

La falta de acción común de los países latinoamericanos suena sospechosa. Parece como si cada país pensara que debe actuar por su lado, defender sus intereses particulares, ver qué ventajas puede conseguir, acomodarse a su manera con el nuevo gobierno estadounidense.

En Argentina, en estos días, el señor Macri está tomando medidas para limitar la migración que muchos desprevenidos podrían relacionar con las que acaba de producir el señor Trump. En lugar de combatir el terrorismo habla de combatir la delincuencia. Que produce, en el imaginario social argentino, el mismo reclamo de represión estatal.

Defender sus propios intereses puede ser una buena idea: solo que muchas veces la mejor defensa propia es una defensa común. Una de las imágenes que más circularon estos días fue una pancarta que alguien levantó en las calles de Washington: First they came for the muslims… and we said not this time, motherfucker —“Primero vinieron por los musulmanes… y esta vez dijimos que no, hijo de puta”— tuvo decenas de miles de me gusta y retuits. Refería al famoso poema que muchos atribuyen a Bertolt Brecht pero escribió el pastor Martin Niemöller: “Cuando los nazis vinieron a llevarse a los comunistas, guardé silencio, porque yo no era comunista…”. Alguien podría decir que primero vinieron por México y que continuarán, pero los gobiernos latinoamericanos prefieren olvidarse del poema alemán.

Quizá deberían recordar la lección principal del populismo, que Trump y Chávez y Kirchner y Putin y Le Pen conocen tan bien: nada une tanto como un buen enemigo. Inventar buenos enemigos es decisivo para estos movimientos confusos: les sirve para crearse objetivos que les den sentido, para cohesionar sus fuerzas diversas y dispersas.

Así que ahora el señor Trump está dedicado con alma y vida a ese noble proceso. Los musulmanes, los políticos, la prensa y, por supuesto, México y, a través de México, el continente de los supuestamente más oscuros, supuestamente más bajitos, supuestamente más taimados y violentos. No es solo una cuestión simbólica: sus políticas proteccionistas ya empezaron a causar problemas en varios países de la región.

Pero sus gobiernos no reaccionan. Por ahora parecen una bandada de avestruces: todos con la cabeza bien hundida en la tierra esperando que si les toca, no les toque muy duro. El ataque contra México es el caso testigo: si el gobierno del señor Trump ve que ninguno de los otros hace nada, la próxima se lo pensará menos todavía y le resultará más fácil. Y habrá, seguramente, carnicería de avestruces.

A menos que la bandada saque la cabeza, se mueva, se reúna, decida apoyar seriamente al país amenazado. La ventaja es para las dos partes: a México le sirve tener el respaldo de los demás países del área; a esos países les conviene tener de su lado al más grande del idioma. Solo que para eso hay que pelearse con el padrastro gritón y a algunos les da un miedo espantoso. Creen que si hacen lo que él quiere, si dicen lo que él quiere escuchar, si le obedecen, les irá mejor.

Entonces, si no es en los palacios, quizá sea en las calles —como en el propio Estados Unidos— donde aparezcan las voces que sí digan y hagan. First they came for the mexicans…

Conoce el restaurante «La Inclusiva», un lugar en donde no existe la discriminación

En la comuna de Ñuñoa está causando revuelo este restaurante propiedad de Juan, un joven que a los 2 años de edad perdió toda la audición de su oído izquierdo producto de una meningitis.

El restaurante «La Inclusiva» se encuentra en la calle de Irarrázaval 3993, en la comuna de Ñuñoa, Región Metropolitana de Chile. El objetivo principal de este negocio es que no existan barreras para nadie, dentro nadie es discriminado; utilizan lenguas de señas, las cartas tienen sistema braille y, por supuesto, es pet-friendly.

Acá un video cortesía de 24horas para que conozca la historia de este luchador de la vida.

El restaurant inclusivo de Ñuñoa

A Juan, quien tiene hipoacusia severa profunda en su oído derecho y sordera total en su oído izquierdo, le cerraron los puertas para trabajar en lo que estudió, gastronomía. Pero no quiso quedarse de brazos cruzados y emprendió con esta gran idea → http://bit.ly/2m484SO

Posted by 24horas.cl on Friday, March 3, 2017

Deja un mundo mejor al viajar

¿Quieres dejar un mundo mejor?, ¡También puedes hacerlo al viajar!. Muchas de estas ideas es probable que ya las hagas, solo es cuestión de llevarlas a cabo donde quiera que viajes, lo cual no tiene que verse como un sacrificio o un deber, sino como un estilo de vida adoptado voluntariamente por el viajero actual, consciente del mundo en el que vive.

Hay que recordar que cada una de nuestras acciones tienen un gran impacto para el mundo durante nuestro viaje, ¡asegúrate de que las tuyas sean positivas y hasta eco sustentables!

1. Desarrolla buenos hábitos

Cuidar el agua al viajar para dejar un mundo mejor

Y actúa como si estuvieras en casa (y si aún no lo haces, comienza ahora). Apaga la luz que no utilices, usa con reserva el aire acondicionado, reutiliza toallas y sábanas, haz uso razonable de agua mientras te bañas o lavas los dientes, emplea baterías recargables para tu cámara. En fin, aplica el principio de Reciclar, Reusar y Reducir. Y lo esencial: Lleva contigo una botella y una bolsa de tela, ambas te servirán durante todo el viaje, evitando generar botellas PET cada vez que tengas sed y bolsas de plástico cada vez que compres. En muchos hoteles u hostales puedes hacer refill de agua.

2. Quédate en un hotel ecológico

Los Hoteles Ecológicos ayudan a dejar un mundo mejor

Opta por los eco hoteles que sigan una política a favor del medio ambiente, aquellos que tratan sus aguas, usan limpiadores no tóxicos, utilizan paneles solares o cosechan sus propias verduras, en fin, tampoco se trata de quedarte en lugares precarios y alejados, sino en hoteles que desarrollan y practican una filosofía muchas veces desde su construcción sustentable. Y los hay aún en las grandes urbes, no solo en la selva. En todo México hay este tipo de hoteles, encuentra el tuyo aquí.

Eco Hoteles en México

3. Viaja en bicicleta.

Una vez escuche que el turismo responsable es a pie, pero reconozco que no podemos ir a todos lados así, pero ¿qué tal una bicicleta o una moto? Al llegar a tu destino o antes, investiga si hay algún servicio de renta de bicicletas o motos, son una manera fácil y económica de desplazarte, oportunidad para relacionarte con la gente local y conocer más a fondo el paisaje.

Viajar en Bicicleta ayuda a dejar un mundo mejor al no consumir combustibles

Entre los lugares más recomendables para andar en bici están: CDMX, Guadalajara, Querétaro, Cabo San Lucas, Puebla y Playa del Carmen.

4. Apoya la economía local

Apoyar a la Economía Local ayuda a dejar también un mundo mejor

Deja a un lado a las grandes corporaciones y mejor opta con contactar directamente a los artesanos, ¡cómprales tus souvenirs a ellos! Es decir, adquiere productos de competencia justa y también, compra en los mercados, un punto esencial en el viaje si quieres adentrarte en las coloridas costumbres del destino. Esto no significa estar obligado con los locales, sino conectarte con los anfitriones.

5. Evita la explotación animal No tomarte selfies con especies en peligro de extinción

Olvídate de tomarte selfies con animales exóticos o visitar centros donde estén capturados solo para beneplácito de los visitantes sacrificando su bienestar. Si quieres ver animales en serio, ve a los centros de rescate o albergues, ahí necesitan ayuda para el cuidado de estas hermanas criaturas, como alimentarlos o bañarlos y si está en tus posibilidades, ¡aporta algún donativo!

6. Habla con la gente del lugar 

Conoce las necesidades de la gente de los lugares que visitas

Acércate a su estilo de vida, te sorprenderás de todo lo que podrás aprender al abrir tu mente a nuevas ideas y personas, escúchalas y si se puede, sé parte de alguna actividad con la comunidad. Vivirás momentos que seguro a la larga te enriquecerán.

7. Investiga las tradiciones o costumbres 

Promueve y comparte las tradiciones de los lugares que visitas

Como ferias del pueblo, festividades, fechas patronales, ceremonias indígenas, y sé testigo de ellas, ya sea como espectador o si es posible, como personal de apoyo, una oportunidad para conocer de cerca la cultura, sin duda milenaria que seguro además de sorprenderte, ampliará tus conocimientos generales y tu sensibilidad.

8. Minimiza tu impacto en cada destino 

No dejes basura ni residuos en tu camino -

Con acciones muy simples como recoger tu basura y no dejar colillas de cigarro ni otros residuos tóxicos en cada playa o bosque, reserva o sitio arqueológico. Solo respeta los señalamientos e indicaciones de cada espacio y pasa la voz a los que anden por ahí, en ocasiones dándoles el ejemplo o diciéndoles directamente. Tomando  en cuenta estos consejos, desde luego, haz algún tour o un circuito en algún destino de México.

9. Haz algún tipo de voluntariado 

Viaja y Participa como Voluntario en Programas Sociales

Tómate tiempo para involucrarte en la comunidad, en su música, sus tradiciones, arte y cocina. Una manera es haciendo un voluntariado, hay organizaciones o particulares que necesitan ayuda para determinado trabajo en el que podrías aportar tu experiencia y al mismo tiempo, enriquecer tu currículum personal, una vivencia significativa en todos los sentidos.

10. Respeta, parte inherente de todo viajero 

Respeta para dejar un mundo mejor

Cada vez que viajes, practica el turismo que muestra respeto por el medio ambiente, la cultura local y el hábitat natural. Hay sitios de gran tradición que requieren ser atendidas al pie de la letra y si eres un visitante debes actuar con reserva y tomar tus precauciones.

Comparte y crea conciencia de que viajando también podemos dejar un mundo mejor.

La imparable infantilización de Occidente

JUAN M. BLANCO

Desde hace años, sociólogos, antropólogos o psicólogos vienen advirtiendo sobre la  infantilización de la sociedad postindustrial. La media de edad aumenta incesantemente, la población envejece, pero los rasgos adolescentes permanecen en una porción significativa de sujetos adultos. La juventud se ha convertido en icono de culto, objeto de incesante alabanza, de veneración. Lo grave no es que la gente intente aparentar juventud física, recurra en exceso a la cirugía estética o a los implantes capilares. Es más preocupante que un creciente porcentaje de adultos se afane en el cultivo consciente de su propia inmadurez. Hoy día no son los jóvenes quienes imitan la conducta de los adultos… sino al revés. La experiencia, el conocimiento que proporciona la edad no es ya virtud sino rémora, un lastre del que desprenderse a toda costa. It’s so hard to get old without a cause. Youth is like diamonds in the sun, and diamonds are forever.

La adolescencia se extiende hoy hasta edades muy avanzadas, generando una sociedad inmadura, unos sujetos que exigen cada vez más de la vida pero entienden cada vez menos el mundo que los rodea

Marcel Danesi, profesor de antropología y autor del libro “Forever Young”, describe este síndrome colectivo: la adolescencia se extiende hoy hasta edades muy avanzadas, generando una sociedad inmadura, unos sujetos que exigen cada vez más de la vida pero entienden cada vez menos el mundo que los rodea. La opinión pública tiende a considerar la inmadurez deseable, incluso normal para un adulto. Como resultado, cunde una sensación de inutilidad, de profunda distorsión: quienes toman las decisiones cruciales suelen ser individuos con valores adolescentes. Va desapareciendo la cultura del pensamiento, de la reflexión, del entendimiento y es sustituida por el impulso, la búsqueda de la satisfacción instantánea.

El discurso político se simplifica, dogmatiza, se agota en sí mismo, se limita a meras consignas, sencillas estampas. Pierde la complejidad que correspondería a un electorado adulto. En concordancia con la visión adolescente del mundo, no se exige en los líderes políticos ideas, capacidad de elaboración, sino belleza, atractivo, tópicos, divertidas frases, una imagen que conecte con un electorado envejecido en edad pero muy rejuvenecido en mentalidad

UBRES Y GLÚTEOS POR ENCIMA DE LA OPINIÓN RAZONADA

Los nuevos tiempos son testigos de la preponderancia de los rasgos infantiles sobre los maduros. La impulsividad, los instintos, dominan a la reflexión; el placer a corto plazo a la búsqueda del horizonte. Los derechos, o privilegios, imperan sobre los denostados deberes, esas pesadas obligaciones de un adulto. La inclinación a la protesta, al pataleo, domina a la auto superación. Y la imagen se antepone al mérito y el esfuerzo.

Resulta preocupante la fuerte deriva de la prensa hacia el puro entretenimiento, la mera diversión, en detrimento de la información y análisis rigurosos. La preponderancia de ubres y glúteos sobre la opinión razonada

Los medios de comunicación actúan en consecuencia: incluso la prensa más seria promociona el cotilleo más obsceno, el chascarrillo, el escándalo, esas noticias que hacen las delicias del público con mentalidad adolescente. Resulta preocupante la fuerte deriva de la prensa hacia el puro entretenimiento, la mera diversión, en detrimento de la información y análisis rigurosos. La preponderancia de ubres y glúteos sobre la opinión razonada.

El creciente infantilismo fomenta la difusión de miedos, esos temores inventados o exagerados que generan los reflejos distorsionados de la calle en la oscuridad de la habitación. Surge una “sociedad del miedo, tremendamente conservadora, que en el cambio ve peligros, no oportunidades. Una colectividad asustadiza, víctima fácil del terrorismo internacional. Nunca fue el mundo tan seguro como en el presente; pero nunca el ciudadano medio vivió tan aterrado. Ni el intelectual tan temeroso de escribir lo que realmente ocurre. Una sociedad bastante cobarde, insegura, que se asusta de su sombra, de lo que come o respira, que siente pánico ante noticias que, por definición, no son más que excepciones. Prueba de ello es la creciente atracción por el milenarismo: igual que en la Edad Media, los predicadores del Apocalipsis ejercen una singular fascinación, aunque sólo pretendan llenarse los bolsillos.

EL POPULISMO, CULMINACIÓN DEL INFANTILISMO

Muchos olvidan que la madurez consiste básicamente en la adquisición de juicio para distinguir el bien del mal, la formación de los propios principios y, sobre todo, la disposición a aceptar responsabilidades. Y que los dirigentes han contribuido con todas sus fuerzas a diluir o difuminar la responsabilidad individual. A sumir al ciudadano poco avisado en una adolescencia permanente. El Estado paternalista aseguró al súbdito que resolvería hasta la más mínima de sus dificultades a cambio de renunciar al pensamiento crítico, de delegar en los dirigentes todas las decisiones. Fue la promesa de una interminable infancia despreocupada y feliz.

La mentalidad infantil encaja muy bien en la sociedad compuesta por grupos de intereses, que tan magistralmente describió Mancur Olson. Unas facciones que actúan como pandillas de adolescentes en entornos donde escasea la responsabilidad, donde el grito, la pataleta, el alboroto, son vías mucho más eficaces para conseguir ventajas que el mérito y el esfuerzo. Un marco, como el español, donde predomina quien más vocifera, “reivindica”, apabulla. O tiene más amigos, mejores contactos. Raramente quién aporta razones más profundas.

El populismo constituye la fase final, el perfeccionamiento del proceso de infantilización

El populismo constituye la fase final, el perfeccionamiento del proceso de infantilización, la cosecha definitiva de esas semillas sembradas concienzudamente por los dirigentes del Mundo Occidental. No es tan significativa la estética quiceañera como el discurso arbitrista, empachado de “lo público”, proclive al reparto de prebendas, tendente a eliminar los restos de responsabilidad individual. Líderes adolescentes y caprichosos para una sociedad infantil, anestesiada, entretenida con los juguetes que los de arriba dejan caer a voluntad.

La rehabilitación de un neonazi

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Duke Schneider es un luchador profesional conocido como Pitbull y un guardia retirado de la prisión en la isla Rikers. Durante ocho años, fue miembro del Movimiento Socialista Nacional. Su devoción era principalmente para Adolf Hitler y después para el grupo de neonazis que dirigía desde su casa en Brooklyn.

Daba discursos en mítines nazis en todo el país. Una pequeña milicia que operaba a lo largo de la frontera de Arizona y usaba insignias nazi lo llamaba constantemente para pedirle consejos.

Sin embargo, hace unos años, cuando se tomó una pausa para hacer un balance de su vida, se dio cuenta de que extrañaba a una amiga, Catherine Boone, una trabajadora de la salud y personalidad de la televisión por cable no muy reconocida. Schneider la había conocido años antes en una convención de coleccionistas de autógrafos. Ahora se veían menos, en parte porque él estaba tan ocupado siendo neonazi y en parte porque sus compañeros no le habrían dado su aprobación.

Boone es una mujer negra.

“Tenía que aparentar que no me afectaba y seguir las enseñanzas de Mi lucha”, explicó Schneider, de 66 años, mientras él y Boone estaban sentados en la mesa de siempre al fondo del restaurante Floridian Diner en Flatbush.

Hoy están felizmente casados y la suya seguramente es una de las historias de amor más inusuales de Brooklyn. “No discutimos por nada”, dijo Boone.

El uniforme de la SS de Schneider está en una bolsa de basura en su ático, y él habla con arrepentimiento acerca de la época que pasó en el Movimiento Nacional Socialista, considerado el grupo neonazi más grande de Estados Unidos.

“No bebía ni violaba la ley, pero era uno de los hombres más malvados que jamás hayan vivido”, dijo Schneider. “No era un hombre de Dios. Era un hombre de Satán que servía a Hitler”.

“En eso tienes razón”, opinó su esposa.

La historia de Schneider es una de las historias de transformación más improbables. Actualmente, dijo Schneider, trabaja como guardia para judíos ortodoxos, resguardando la entrada de las sinagogas, algo que considera un honor.

Para entender cómo se hizo neonazi, Schneider dijo que ayuda saber que de niño se sentía rechazado. “Crecí trastornado”, dijo. Su padre estaba ausente y su madre lo “odiaba porque se lo recordaba”; además, un familiar mayor que él lo golpeaba sin piedad.

De niño, su espalda a veces tenía heridas porque le daban latigazos con una correa para perros. Él solía ver documentales, y nada se comparaba con su fascinación con programas sobre el Tercer Reich. Los imponentes uniformes y la idea de una raza superior lo cautivaron. “¿Por qué no puedo ser tan fuerte como lo eran ellos?”, se preguntaba.

Comenzó a practicar la halterofilia y se unió a los círculos de lucha profesional. Durante 20 años, fue guardia en una correccional de la isla Rikers, para después retirarse en 1999.

A lo largo de los años, Schneider siguió teniendo una obsesión no tan secreta con los nazis.

Ya retirado, Schneider encontró un trabajo como guardia y volvió a ser luchador. En su tiempo libre, asistía a eventos como el Chiller Theater Expo, una convención de firmas de autógrafos para quienes antes fueron famosos o casi famosos. Ahí comenzó a charlar con Boone, quien estaba firmando fotografías para fanáticos que la reconocían por su trabajo en el Canal 35, una estación de televisión por cable de acceso público. También había actuado en algunos filmes de terror.

Schneider era guardia de seguridad y Boone necesitaba protección. Ella le dijo que le temía a un hombre violento con el que había tenido una relación. Schneider se convirtió en su protector. La acompañaba de compras y la visitaba para ver si se encontraba bien. Ella terminó por mudarse a su casa. Fue entonces cuando él se volvió neonazi.

Los motivos de Schneider no eran muy claros. Según lo que relata, su intención era infiltrarse al movimiento supremacista blanco como agente encubierto. La razón, dijo, era que a Boone la habían acosado unos skinheads en un autobús público. Consternado por la forma en que la trataron, comenzó a investigar acerca de supremacistas blancos en internet.

No obstante, después de medio siglo de fascinación con los nazis, Schneider se dio cuenta de que le emocionaba marcar el número del Movimiento Nacional Socialista. Habló con un reclutador, llenó una solicitud de membresía y compró un uniforme nazi. Cuando llegó, se lo probó de inmediato. “Era casi como tener seis años de nuevo”, dijo.

Schneider y Boone llevan cuatro años de casados. Credit. Joshua Bright para The New York Times

En cuestión de meses, se unió al círculo interno de la organización, su grupo de las SS. Se rasuró la barba y juró lealtad y dedicar su vida a Hitler y a Jeff Schoep, un neonazi en Michigan que dirigía el Movimiento Nacional Socialista en Estados Unidos.

La mayoría de los estadounidenses que saben de la organización, si acaso lo hacen, es a causa de las marchas del grupo. Las reuniones a menudo se vuelven riñas. Cuando Schneider iba a las marchas, en Carolina del Sur, California, Nueva Jersey y otros lugares, Boone a menudo se quedaba despierta hasta tarde, ponía fotos de Schneider en toda su cama y las veía hasta que empezaba a llorar.

“Oraba para que regresara a salvo y rezaba para que renunciara a esa organización”, recordó.

Schneider se volvió uno de los representantes públicos del grupo; pronunciaba discursos en mítines y hacía declaraciones a los medios. Comparó a los inmigrantes indocumentados con cucarachas y cuando le preguntaban acerca del Holocausto hablaba sobre cómo los alemanes también habían sufrido.

En los mítines, convivía con personas que habían puesto a sus hijos el nombre de Hitler y con otros que expresaban su odio con su piel. “Muchos de ellos tuvieron infancias muy infelices y se comportaban como niños perdidos, y yo creía que quizá podría ayudarlos”, dijo Schneider, quien tiene una voz suave que suena ligeramente nasal, lo cual muy probablemente se debe a que le rompieron la nariz una decena de veces.

Sin embargo, Schneider también estaba cegado, dijo, por su rápido ascenso. “Tenía a cien hombres bajo mi poder, listos para hacer lo que yo dijera”, comentó. Schneider no pensó las cosas dos veces, ni siquiera después de las muertes violentas de dos hombres que consideraba sus compañeros.

“Quería que mis antiguos compañeros supieran que esta mujer negra es mi esposa. Sí, amaré por siempre a esta mujer, y estoy renunciando al nacionalsocialismo”. Duke Schneider

En 2011, Jeff Hall, un líder californiano del movimiento, murió después de que su hijo de diez años le disparara. “Yo le había asignado un puesto más alto y le había dado su uniforme”, dijo Schneider acerca de Hall. Al año siguiente, J. T. Ready, quien había patrullado la frontera entre México y Arizona y había detenido a inmigrantes, mató a tiros a cuatro personas antes de suicidarse, dijeron las autoridades.

También en 2012, los médicos hallaron lo que parecía ser un tumor cancerígeno en la garganta de Schneider. El pronóstico no era bueno.

Durante años, Schneider había sentido que se distanciaba cada vez más de Boone, pero de pronto se dio cuenta de que ella “era la única que lo hacía sentir como si hubiera esperanza”. Con su apoyo, habló con el pastor de ella. En una misa dominical, se presentó ante la congregación; “confesé todo y me arrepentí”, dijo Schneider. “Creí que estaba a punto de morir”.

El tumor de Schneider resultó ser benigno, un milagro de Dios, dijo. Desde su cama en el hospital, Schneider le dijo a Boone: “En cuanto me recupere… nos casamos”. Semanas después, lo hicieron.

La noticia llegó hasta el Movimiento Nacional Socialista cuando la esposa del pastor publicó fotos de la boda de la pareja en Facebook. Los neonazis en todo el país lo atacaron verbalmente. Schneider sintió alivio. “Quería que mis antiguos compañeros supieran que esta mujer negra es mi esposa. Sí, amaré por siempre a esta mujer, y estoy renunciando al nacionalsocialismo”, dijo.

Schneider llamó a su comandante para renunciar. De ahora en adelante, le dijo Schneider a Schoep, viviría según las enseñanzas de la Biblia y no de Mi lucha.

“Estaba haciendo algo con lo que no estamos de acuerdo: mezclar las razas”, dijo Shoep en una entrevista telefónica. “Estoy intentando decirlo de buena manera, pero en verdad no creemos en eso”.

En el restaurante Floridian Diner, muchos comensales conocen a Schneider como el exluchador. Cuando lo saludan en su mesa, Boone saca un montón de fotos en las que Schneider luce más joven y más feroz, y se las enseña a cada uno después de que su esposo les da su autógrafo.

Ya llevan cuatro años de casados, un periodo que trajo consigo “muchos cambios felices”, comentó. Uno de ellos, dijo, fue su trabajo actual como guardia en yeshivás y sinagogas. Lo ha conmovido la amabilidad de los familiares de los rabinos, quienes le llevan sopa cuando hace frío. “Ahora amo y respeto a estas personas”, dijo.

Expresó su ansiedad de que se descubriera su pasado y lo expulsaran. “Le rezo a Dios para que nunca lo averigüen”, dijo.


Fuente: nytimes
Fotografía principal de Joshua Bright para The New York Times

He aprendido a no dar mi corazón a quien solo busca mi piel

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Con el tiempo acabamos dándonos cuenta de que el amor no se hace con el cuerpo, sino con el alma.

La pasión que de verdad complace es aquella donde nuestro ser viaja más allá de la piel para inscribirse en dos mentes que se abren, que se desnudan en afectos, en certezas y sentimientos. Que bailan en silencio sintiéndose una sola.

Los expertos nos dicen que la piel es el órgano sexual más importante del ser humano. Las personas necesitamos ser tocadas para sobrevivir, y en ocasiones, nos basta una caricia para activar miles de receptores sensoriales capaces de enhebrar una emoción, una sensación. Sin embargo, en el amor auténtico, la sinfonía de sensaciones integradas en nuestra piel no siempre son suficientes. Queremos más. 

Te proponemos reflexionar sobre ello.

giphy

Búscame debajo de la piel

No es fácil encontrar a alguien con quien colapsar de este modo: en emociones, en valores, en sensaciones y complicidades. Son como borracheras de los sentidos donde todo encaja de pronto, donde todo armoniza y no quedan vacíos que llenar. El alma se ilusiona y el corazón despierta de su letargo invernal, justo cuando pensábamos que ya no íbamos a ser amados.

Porque siempre llega un momento en que nos cansamos de los amores cobardes, de los que no arriesgan, de los que fenecen como una tormenta al final del verano. Tras la pasión y las promesas tejidas en noches de caricias, llega la calma, llega la mañana luminosa, ahí donde no hay espacios para las mentiras y donde solo queda una ausencia al otro lado de la almohada. Junto las cenizas de todos los sueños rotos entremezcladas con las lágrimas.

Al final, efectivamente, aprendemos. Recogemos nuestros pedazos rotos con mucho amor propio para unirlos de nuevo con la mejor de las dignidades. Repitiéndonos a nosotros mismos el mantra de que “nunca más volverán a hacernos daño”. Aprendemos que el mejor amante es aquel que tiene la osadía de buscarnos más allá de la piel e incluso de desnudarse emocionalmente ante nosotros.

pareja abrazo bajo la ropa


Fuente: utopico

Investigadores abren el Santo Sepulcro

Por primera vez, en al menos dos siglos, científicos accedieron al lugar considerado por los cristianos como la tumba de Jesucristo, en la iglesia del Santo Sepulcro en Jerusalén. Sus hallazgos preliminares parece confirmar que las porciones de la tumba han sobrevivido hasta el día de hoy, resistiendo a siglos de daños, destrucción y reconstrucción de la iglesia ubicada en la Ciudad Vieja de Jerusalén, Israel.

Considerado como el lugar más venerado del mundo cristiano, actualmente la tumba consiste en una cama de entierro de piedra caliza que fue cortada de la pared de una cueva. El lecho está cubierto de revestimiento de mármol, con el objetivo de evitar que los peregrinos extraigan fragmentos de la roca original como recuerdo.

La investigación

El revestimiento de mármol fue removido por primera vez el pasado 26 de octubre y una inspección del equipo de conservación de la Universidad Técnica Nacional de Atenas mostró que había solo una capa de material de relleno debajo.

Pero mientras continuaban con la investigación, sin parar y en un transcurso de 60 horas, encontraron otra losa de mármol con una cruz tallada en la superficie.

Horas antes de que la tumba fuera sellada nuevamente, pudieron ver la cama de enterramiento de piedra caliza, intacta.

Además, se pudo confirmar la existencia de las paredes originales de cuevas de piedra caliza en el santuario que encierra la tumba.

Para los arqueólogos, el hecho de que la tumba haya permanecido intacta durante siglos, es algo realmente increíble.

¿La tumba de Jesús?

Según la tradición cristiana, el cuerpo de Jesucristo fue colocado en un lecho funerario tallado en la roca después de su crucifixión por los romanos. Los cristianos creen que Cristo resucitó y cuando fueron a ungir su cuerpo (con óleo sagrado para recibir el sacramento) tres días después, no encontraron nada.

Para los expertos, es arqueológicamente imposible decir que la tumba descubierta en la Iglesia del Santo Sepulcro es definitivamente el sitio de enterramiento de Jesús de Nazaret. Pero hay evidencia indirecta que sugiere que la identificación del sitio por representantes del emperador romano Constantino, unos 300 años después, puede ser razonable.

Constantino tenía un santuario instalado sobre la cueva. La parte superior original de la cueva fue removida para que los peregrinos miraran hacia abajo y vieran la losa donde se decía que el cuerpo de Jesús estaba descansando.

Arqueólogos han identificado más de mil tumbas rocosas en la zona alrededor de Jerusalén. Cada una de estas tumbas familiares consistía en una o más cámaras funerarias con nichos largos cortados en los lados de la roca para acomodar cuerpos individuales. Lo que demuestran que la zona alrededor de Jerusalén era un cementerio judío en el hipotético tiempo de Jesús.

Para los expertos, el hecho de si la tumba contuvo alguna vez los restos de Jesucristo, es una cuestión de fe, dado que no hay restos para analizar o pruebas de ADN que puedan exhumar para comprobarlo.

Para el arqueólogo Martin Biddle, la única manera de saber realmente por qué la gente cree que la tumba de Jesús se encuentra allí, es revisando cuidadosamente los datos recogidos del lecho y las paredes, cuando se permitió el acceso.

El equipo de la Universidad Técnica Nacional de Atenas se encuentra en el proceso de restauración del santuario, reforzando, limpiando y documentando cada centímetro para obtener información valiosa que permita comprender mejor el origen y la historia de este lugar sagrado.