A través de un twitt, el papa Francisco a generado el regocijo de muchos fieles por una frase que muestra el humor y manera de ver la vida de este gran hombre. «Vietato lamentarsi» («Prohibido quejarse»), es la frase enmarcada que resguarda la entrada a la habitación del papa Francisco.
A través de la cuenta de Twitter Vatican Insider (Es), del periódico italiano LaStampa, se dio a conocer la polémica imágen:
A lo cual, el papa Francisco dijo «los transgresores son sujetos a un síndrome de victimismo con la consecuente disminución del tono del humor y de la capacidad para resolver problemas […] la sanción es doble si la violación es cometida ante la presencia de niños [y] para volverse el mejor de uno mismo hay que concentrarse en las propias potencialidades y no en los propios límites, por lo tanto: deja de quejarte y actúa para hacer mejor tu vida”.
El mes pasado, el 14 de junio Salvo Noé visitó al Papa y le regaló su libro, una pulsera y el aviso. Papa Francisco le dijo: “Lo voy a poner en la puerta de mi oficina, en donde recibo a las personas”. Lo cumplió y fue más allá, lo puso en la puerta de su misma habitación.
El Exorcista, una película de culto que todo cinéfilo que se diga amante del género de terror y los thrillers debería haber visto. Pero, ¿sabes la historia en la que está basada esta película ganadora de dos premios Oscar?
Hace unos meses en el portal aleteia.org, Alvaro Real recordó aquella película terrorífica en donde una joven era poseída por un ser demoniaco, pero que al parecer estuvo basada en una historia real que fue publicada por el «Washintong Post» en 1949 y que inspiraría la novela homónima de también guionista de la película, William Peter Blatty.
Según las palabras de Alvaro Real «todo comienza cuando el menor Robbie, un niño de 14 años de edad, escuchó unos ruidos en el sótano. Buscó por toda la casa y comenzó a ver cosas extrañas: una representación de Jesús en el cuarto de la abuela se torció y se empezó a mover como si alguien golpeara la pared desde atrás. “Once días después de aquel extraño suceso, falleció una tía muy querida por Robbie que era aficionada al juego de la ouija. Él propio niño también lo era”, explica el reportaje.
Después de esta vivencia comenzaron los fenómenos paranormales: “el colchón de la cama de Robbie se movía de forma violenta en plena noche, los golpes desde el sótano eran constantes, un olor a excremento inundaba todo y objetos ordinarios -como un jarrón- se suspendían en el aire”.
La familia con la incógnita de saber qué ocurría pidieron ayuda a un pastor luterano que se atemorizó tanto que aconsejó que fuera un exorcista católico quien se hiciera cargo del caso.
Se investigó y finalmente se procedió a conceder la licencia para realizar un exorcismo. Lo que ocurrió puede observarse en la película. El niño ataca al sacerdote, se produce una agresividad inédita y una fuerza perturbadora. Todos los síntomas de lo que se cataloga posesión demoníaca.
Se realizaron múltiples exorcismo y se ingresó al joven en una institución mental de Baltimore para controlarlo. Finalmente un buen día, explica el portal ABC, “apareció la palabra salida en su cuerpo y al día siguiente, con la misma velocidad con la que habían surgido, terminaron los sucesos y el niño volvió a su estado normal”.
Su historia continúa siendo un enigma y aún nadie ha podido explicarse ese comportamiento. Su historia y su vida es el germen de lo que posteriormente se ha convertido en una de las películas más terroríficas de la historia.»
«Gracias, abuelo», tituló su carta Alexis de Chaunac, nieto del recién fallecido pintor José Luis Cuevas. DEsde Nueva York, Alexis escribió estas palabras que se publicaron en un reconocido periódico mexicano. Sus palabras, llenas de amor y nostalgia, dejan notar la relación que tuvo con su abuelo y el arte:
«Entro a la sala de la colección permanente del Museo de Arte Moderno (MoMA) y me encuentro cara a cara con las obras de los tres muralistas mexicanos, Siqueiros, Rivera y Orozco y, en seguida pienso en él, mi abuelo, José Luis Cuevas, quien ilustremente estuvo en ruptura con estos gigantes.
Media hora después recibo una llamada de mi madre Mariana llorando: mi abuelo ha fallecido. Una profunda tristeza y melancolía me viene a la mente y mis primeros recuerdos de mi infancia en México brotan: en el estudio de mi abuelo, rodeado de libros, libretas de dibujo, de apuntes, objetos extraños y fetichistas, obras en proceso o acabadas… El arte como parte de la vida diaria, así me recibió el mundo.
Hace exactamente 20 años, me acuerdo entrar al Museo José Luis Cuevas con mis dos abuelos en cada mano. Era el día de mi cumpleaños y me llevaron a una de las oficinas de atrás. Mi abuela Bertha, una mujer extraordinaria, saca de su bolsa una cajita de madera. Me la da, la abro y adentro encuentro pinceles, plumillas y tintas. Esa cajita la sigo teniendo ahora en mi estudio donde pinto. En esos primeros años de infancia, tenía una gran complicidad con mi abuelo; lo acompañaba al taller de grabado, a grabaciones para el radio, a conferencias de prensa, a inauguraciones de exposiciones… Al siguiente año, nos mudamos a París con mis padres y mi hermano Axel. Ese mismo año, mi abuela falleció y el acceso a mi abuelo se fue cortando poco a poco después de su segundo matrimonio.
Me dolió profundamente que ya no pudimos pasar más tiempo juntos, intercambiar ideas, contar historias, reír de todo y de nada. Pero, desde ese entonces, guardé atesorado en mi corazón esos primeros pasos con el arte y mi profunda admiración por este abuelo fuera de lo común.
La última vez que lo vi fue en una comida familiar en el San Angel Inn hace ahora cinco años; caminé en el patio a solas con él y le mostré un cuaderno de dibujo. Cuando él veía las hojas repletas de líneas y trazos formando personajes, sentí en su mirada el orgullo de haber impulsado a su nieto la creatividad y de haber transmitido su amor y dedicación por el arte en lo poco que pudimos estar juntos estos últimos años.
Después de la noticia de su fallecimiento, me regresé al estudio, me senté frente a la mesa para pintar y me di cuenta de que en realidad había estado con él todos estos años a través de la práctica del dibujo, ese poderoso mediador que rebasa tiempo y espacio. Tomé el pincel y empecé a dibujar, dejé la mano ser y fue como si una fuerza interna la dirigiera. La línea se fue formando, creando vida de la nada.
Gracias, abuelo; gracias porque en cada línea, en cada trazo, siento tu presencia.»
Fuente: El Reforma
Fotografía: (Xinhua/David de la Paz) (da) (rtg)
Hace unos días en el portal reconquistandoeden.com se publicó un artículo bastante interesante derivado de una carta del Hospital John’s Hopkins, en dónde declaraba que el tratamiento de quimioterapia era «una gran equivocación médica». ¿Quieres saber sus razones? Te dejamos el artículo que, sin duda, dejará pensando a más de uno:
«Después de muchos años de decirle a la gente que la quimioterapia es la única manera de tratar (tratar literalmente) y eliminar el cáncer, el Hospital John Hopkins esta finalmente empezando a decir a la gente que hay alternativas.
Toda persona tiene células cancerígenas en el cuerpo. estas células no se ven en los chequeos regulares hasta que se han multiplicado a unos pocos billones. cuando los doctores le dicen a los pacientes de cáncer que no hay mas células cancerígenas después del tratamiento, solo significa que los chequeos no las detectan porque ellas no han llegado a un tamaño detectable.
Las células de cáncer ocurren 6 de 10 veces en la vida de las personas.
Cuando el sistema inmunológico de una persona es fuerte, las células cancerígenas serán destruidas y se prevendrá la multiplicación y formación de tumores.
Cuando una persona tiene cáncer, esto indica que esa persona tiene muchas deficiencias de nutrición. esto puede ocurrir por diferentes motivos como genéticas, de medio ambiente, alimenticios y por modo de vida.
Para resolver esas muchas deficiencias de nutrición, el cambiar de dieta e incluir suplementos es imprescindible para reforzar el sistema inmunológico.
La quimioterapia en realidad envenena las células de cáncer, pero también destruye las células sanas de la médula espinal, así como también las del intestino y eso produce daño en los órganos como el hígado, riñones, corazón y pulmones.
La radiación, cuando destruye las células cancerígenas, también quema y daña las células sanas y los órganos, así como también los tejidos.
El tratamiento inicial de quimioterapia y radiación muchas veces reduce el tamaño de los tumores, pero un prolongado uso de la quimioterapia y la radiación no tiene como resultado la destrucción total de los tumores.
Cuando el cuerpo tiene muchas toxinas debido a la quimioterapia y la radiación el sistema inmunológico esta comprometido o destruido, por eso las personas pueden sufrir varios tipos de infecciones y complicaciones.
Quimioterapia y la radiación puede causar la mutación de las células cancerígenas, que se resistan y se haga difícil su destrucción total. La cirugía puede también provocar la invasión de las células a otros órganos.
Una manera efectiva de combatir ‘el cáncer’ es no darle de comer a las células cancerígenas con aquellos alimentos que necesita para multiplicarse.
Las células de cáncer se alimentan de:
Azúcar es un alimento del cáncer. no consumiendo azúcar se corta uno de los mas importantes elementos de las células cancerígenas. existen sustitutos del azúcar como sacarina, pero esos están hechos con aspartamo y es muy nocivo. Un mejor sustituto del azúcar es miel de manuka o melaza, pero en pequeñas cantidades. La sal tiene un químico que se le agrega para que se vea blanca. Una mejor alternativa para la sal es la sal de mar o sales vegetales.
Leche causa al cuerpo la producción de mucus, especialmente en el conducto intestinal. Las células cancerígenas se alimentan de mucus, eliminando la leche y sustituyendo por leche de soya, las células de cáncer no tienen que comer por consiguiente se mueren.
Las células de cáncer maduran en un medio ambiente ácido. una dieta basada en carne roja es ácida, es mejor comer pescado, y un poco de pollo, en lugar de carne vacuna o cerdo. La carne además tiene hormonas y parásitos que son muy nocivos, especialmente para las personas con cáncer. la proteína de la carne es muy difícil de digerir y requiere muchas enzimas. la carne que no se digiere queda en los intestinos y entra en estado de putrefacción y lleva a la creación de más toxinas.
¿Cómo contribuir a la solución del problema?
Una dieta de 80 % de vegetales frescos y jugos, granos, semillas, nueces, almendras y solo un poco de frutas ponen al cuerpo en un ambiente alcalino. solo un 20% se debe consumir en comidas cocidas, incluidos los porotos (frijoles). jugo de vegetales frescos proporcionan al cuerpo coenzimas que son fáciles de absorber y llegan a las células después de 15 minutos de haber sido consumidos para nutrir y ayudar a formar células sanas. para obtener enzimas vivas que ayudan a construir células sanas se debe tratar de tomar jugos vegetales (casi todos incluido alfalfa) y comer muchos vegetales frescos 2 o 3 veces al día. Evitar tomar café, te y chocolate, pues tienen mucha cafeína. el te verde es una mejor alternativa y tiene propiedades que combaten al cáncer. el agua es mejor tomarla purificada, o filtrada para evitar las toxinas y metales pesados del agua de la canilla. agua destilada es ácida, no tomarla.
Las paredes de las células de cáncer están cubiertas por una proteína muy dura. Evitando comer carne, estas paredes liberan mas enzimas que atacan las proteínas de las células de cáncer y permite al sistema inmunológico destruir las células cancerígenas.
Algunos suplementos ayudan a reconstruir el sistema inmunológico (florescence, essiac, anti-oxidantes, vitaminas, minerales, efas (aceite de pescado) para ayudar a las células a luchar y destruir las células cancerígenas. Otros suplemento como la vitamina e son muy conocidas porque causan apóptosis, el método normal del cuerpo de eliminar las células innecesarias o defectuosas.
El cáncer es también una enfermedad de la mente, el cuerpo y el espíritu. Una actitud mas activa y positiva ayudará a combatir al enfermo de cáncer a convertirse en un sobreviviente. La rabia y la incomprensión, el no perdonar pone al cuerpo en una situación de estrés y en un medio ambiente ácido. Aprender a tener un espíritu amable y amoroso con una actitud positiva es muy beneficioso para la salud. Aprender a relajarse y disfrutar de la vida. Busque a su Creador en oración, El le dará salud.
Las células de cáncer no pueden vivir en un ambiente oxigenado. Ejercicio diario, y respiración profunda ayuda a recibir más oxígeno hasta niveles celulares. La terapia de oxígeno es otro elemento que ayuda a destruir las células de cáncer.
No contenedores de plástico en el microondas.
No botellas de agua en el refrigerador.
No papel plástico en el microondas.
Químicos como las dioxinas causan cáncer, especialmente de seno. La dioxina es muy destructiva, especialmente para las células del cuerpo.
No ponga en el refrigerador sus botellas de agua de plástico ya que el plástico elimina dioxina y envenena el agua. Recientemente, el doctor Edward Fujimoto estuvo en un programa de televisión y explico el peligro de la dioxina. El dijo que no tenemos que poner contenedores de plástico en el microondas. especialmente las comidas que tienen grasas. dijo que la combinación de grasa y calor fuerte con el plástico elimina dioxina dentro de la comida y por consiguiente luego a nuestro cuerpo. En su lugar se puede usar vidrio, como pirex o cerámica para calentar la comida.»
Un alma atormentada y sobrevolada de talento. Mucho tiempo antes de que la sátira política de Banksy plagara las calles, o el trabajo de Basquiat y Keith Haring llegara a cambiar el mundo del arte para siempre, estaba el artista urbano Richard Hambleton.
Un artista clásicamente entrenado como pintor, Hambleton fue conocido en los 80 por sus obras en Manhattan que tenían una agresiva y dudosa reputación, así como una energía autodidacta. Primero llegaron sus trazos con gis (los cuales también aparecieron en otras ciudades), luego llegaron las misteriosas pinturas de sombras, que mostraban la silueta de un hombre acechando en los corredores más oscuros de la ciudad. Hambleton, quien se volvió desconocido al mismo tiempo que Basquiat y Haring mundialmente famosos, es ahora el tema del director de documentales Oren Jacoby. Estrenada en el Tribeca Film Festival,Shadowman sigue las resurrecciones, ascensiones y caídas del artista.
Tal y como Shadowman lo cuenta, el artista nacido en Vancouver, tomó sumisterio de asesinato, es decir, las delineaciones con gis, en una gira por la costa oeste de EUA, y pasó por Seattle, San Francisco y Los Ángeles. Luego, trabajó para cruzar todo Estados Unidos, llegando a la ciudad de Nueva York en 1978, justo en el momento en el que la escena artística comenzaba a explotar como nunca antes. Sus misteriosas obras tomaron refugio en TriBeCa y en otros lados, con pintura roja como la sangre esparcida por las líneas blancas, éstas inmediatamente sacaron a todos de juicio –incluyendo a la policía. Esto atrajo mucha atención mediática y lo hizo rápidamente un artista mundialmente famoso.
Standing Man. Foto de Hank O’Neal.
Aunque tenía práctica de estudio, Hambleton siguió creando arte público en las calles con posters de tamaño real de si mismo, titulados, Solo tengo ojos para ti, antes de plagar el «Lower East Side» con sus pinturas de Shadowman. Eventualmente, Hambleton se distanció de estas obras figurativas y minimalistas, para hacer sus Pinturas Hermosas, que incluían lienzos enormes con impresionantes olas de mar. Después de tomar éxtasis durante los 80, Hambleton cayó en un terrible hoyo de adicción a la heroína y al crack, llegando a ser indigente varias veces. Siempre tuvo arte y nunca dejó de hacerlo.
Mucho de esto es delineado, seguido con detalles incómodos, en entrevistas y seguido con pequeños clips, la cámara de Jacoby revela a un hombre lleno de ira, destrucción y talento desgastado por años de adicción y cáncer de piel, cosa que tristemente había atacado su rostro. Esto es particularmente triste porque, tal y como las fotos y los archivos muestra, además de su obvio talento artístico, Hambleton resaltaba por su belleza, así como su nueva y seductora voz.
Jacoby, siendo un yanqui nativo, primero se encontró con la obra de Hambleton entre 1980 y 1981 mientras dormía en el departamento de un amigo en SoHo. El vecindario estaba desolado y desértico, y en estas vacías calles, él recuerda encontrar bizarras pinturas de sombras. Poco después, Jacoby vio los «misterios de asesinato» de Hambleton, cosa que lo emocionó de una manera diferente. Pero, nunca supo que eran creaciones del artista.
A shadow painting en 34th East 12th Street. Foto de Hank O’Neal.
«No supe quien era hasta 30 años después cuando un amigo, el fotógrafo Hank O’Neal, me llevó al estudio de Richard y me lo introdujo, eso fue en el 2009», dice Jacoby, quien empezó el documental pronto después. Fue una oportunidad extraña ser invitado dentro del mundo de Hambleton. «Tan pronto como lo conocí sentí que había algo inusual ahí. El último tercio de la película muestra a Richard con dos comerciantes de arte jóvenes – ahí fue donde comencé. Yo estuve ahí desde que llegaron y empezaron a platicar con él.»
«Me sentí increíblemente incómodo y supe que esta interacción muestra algo realmente interesante del mundo del arte: cómo el arte y el comercio se conocen», él añade. «Los compromisos que el artista debe de hacer simplemente para poder tener una carrera. Y vi eso derramarse justo en mi cara.»
Richard Hambleton. Photograph by Ben Buchanan.
No obstante que Jacoby nunca «se sentó» a platicar con Hambleton, sí grabó al artista en conversación con amigos suyos. Él dice que cualquiera que lo conozca no puede evitar enamorarse de su carisma. Los espectadores ven entrevistas con exnovias, amigos y gente cercana. Inclusive se puede ver cómo Hambleton mismo usaba su mente dinámica e
«La cosa impresionante para mí de esta película, fue la cantidad de gente que fue atraída por los años hacia Richardo, no sólo por su arte sino por su persona y empatía por su situación», dice Jacoby, «Cualquiera que haya tratado con Richard fue puesto al límite, y tuvo que hacer cosas muy complejas para hacer suceder otras cosas. Y ellos sólo podrían haber hecho eso gracias a sus intensos sentimientos por el tipo.»
Oren Jacoby filming Richard Hambleton in 2010.
Aunque Hambleton sigue vivo, la película sorprende con un final muy explosivo. Es 2016, y Hambleton está viviendo en Chinatown y sufriendo de mala salud. Su lucha en contra del cáncer y la adicción están cobrando su factura, pero él se mantiene firme en su producción artística. No ha cambiado mucho en el 2017, pero Jacoby dice que Hambleton está emocionado por el estreno de la película.
«Nada me sorprendió en los ocho años de trabajo de esto más que mis interacciones con Richard. Los subes y bajas, todos los obstáculos y problemas en hacer la película, y la manera como él ha respondido a ésta», comenta Jacoby. «Él regresó a la vida. Está produciendo muchísimo y tendrá un show pronto este año.»
«También está pensando en hacer otra pieza de arte urbano cuando termine el festival, cosa que no ha hecho en años», añade Jacoby, «Es demasiado gratificante ver que ha sido algo muy positivo para él, tanto así que es reconocido y quiere trabajar más.»
Los marqueteros son una de esas estirpes extrañas, mentes a veces sumamente creativas e ingeniosas que terminan sirviendo al lado oscuro, en aras de hincharse los bolsillos y hacer más grande el imperio del capitalismo, ese del que todos renegamos y mamamos deliciosamente a partes iguales. Vender, vender, por encima de todo, parecen decir los millones de comerciales que nos hemos soplado por siglos, ya sea en forma de cupones, convencimiento verbal o, peor aún, jingles televisivos.
Quien haya crecido y hecho la tarea con la televisión al lado, seguro tiene esa enfermedad que implica ir por un antigripal y subvocalizar un «adiós a la gripa en un, dos, por tres», sin siquiera tener que ver la cajita del XL 3.
Es espantoso saber que dentro de nuestros recuerdos de infancia más sagrados, ahí donde habitan juntos el rostro de la abuela o el primer beso, se albergan cosas del calibre de «huele a pollo, sabe a pollo… es de pollo», «póngale lo sabroso», «entre el zapato y el pantalón está el detalle de distinción» y un kilométrico chorizo de jingles que han forjado, nos guste o no, la forma en la que consumimos.
A la publicidad le gusta explotar cualquier cosa que tenga el mínimo de valor dentro de la vida humana con tal de incrementar las ventas. No importa qué filiación ideológica tengas, a qué religión pertenezcas o cuáles sean las cosas más sagradas en las que creas. Desde hace miles de años, cuando los egipcios conocían el arte de embaucar para que les compraras, hasta los tiempos del marketing digital, la mercadotecnia siempre ha tenido una de sus mejores armas: el jingle. La música, carajo, la música.
Rolas de la infamia que se pegan en la psique y primero mueres antes que salgan del inconsciente colectivo. México ha consumido grandes cantidades de rolas que se insertan en la cultura. Pésimas, chafas, malas. Y sin embargo… ¡ay, qué rico!
No todos nos vimos vivos como Los Dynamite como para darle shut down al comercial de Telcel y tener un mejor recuerdo de tu pequeño one hit wonder. Pero la posteridad mexicana la recordará, como cientos, como miles… como recordará estas diez perlas marqueteras:
1. Bacardí – «Agarra la jarra»
México tardó un ratote en agarrar la onda de que la modernidad implicaba también el ser aspiracional en todo momento y renegar de lo que uno era. Por eso todo nos llegaba tarde, por eso las ganas de ser Berlín siempre se amorenan. Pero la vida antrera ya iba agarrando vuelo y logramos poner de moda el ron: que la vida nocturna y sórdida fuera cool.
A finales de los setenta y principios de los ochenta, vender vicio en la televisión era bien visto. No había nada mejor que tomarse una cubita sudada e invitar a Paty, la secre del patrón, a echarse unos quiebres al Centro, con unas rolas de los grupos de moda, prominentemente provincianos en su mayoría.
«Agarra la jarra» era una rola original de Los Audaces del Ritmo, en donde el mensaje era claro: «chupa para que estés en onda y puedas gozar». Quién mejor que Bacardí para agarrarla como bandera. Obvio hoy eso ya no se puede hacer. Agarrar la jarra es una expresión de tío briago a la mala, de exceso decadente y todo menos «de onda». Sin embargo, cada que vemos el comercial se nos antoja un tubito con hielos pa’ la caminera.
Bien jugado por el genio publicitario Isaac Chertorivsky, quien hiciera algunos de los mejores comerciales para Bacardí.
2. Herdez – «El Sinaloense»
Hubo un momento en el que Herdez era amo y señor dentro del mundo de la publicidad por fundir tres elementos clave: las canciones de moda, la identidad gastronómica mexicana y el imaginario popular.
«El sinaloense» es una canción altamente popular en el universo vernáculo mexicano. La versión más famosa proviene de la primera generación de La Banda El Recodo, décadas antes de que el narco transformara la gamuza de sus trajes en lentejuelas multicolor.
Esta apoteosis musical de machismo local data de 1943 y se transformó para servir de jingle en uno de los comerciales más vistos de los noventa en nuestro país, multipremiado y súper antojable. La palabra chilito, con imágenes de salsas y tacos, nos hacían olvidar el maldito sabor del envasado al vacío y de los chiles pasteurizados. Pero ni modo: «que me pongan una torta, ay mamá por Dios». Los odio.
3. Carta Blanca – «Chiquitibum»
Más machismo. Cero vedado y en este caso recién revalorado, ya que la Chiquitibum es toda una efigie de la calentura masculina mexicana: futbol, chelas y chichis. Hay quienes hoy en día le siguen diciendo Chiquitibum a cada chica con pechos prominentes que se encuentran en la calle. México ochentero, ese recién debastado por el terremoto, ese de futbol todavía aguerrido, en donde nació la ola, tan lleno de borrachos y de chiqui-ti-bum-a-la-bim-bom-ba. Éramos otros.
Mar Castro, la guapa mujer malageña que encarna el grito porril de la afición mexa en aquel entrañable e infame comercial de chela, obtuvo un jugoso contrato después de este comercial, para después aparecer en El Camino Secreto, al lado de la cabellera más larga del ejido, Daniela Romo, o cantando una versión en español de «Fool of me» para la película Love and Basketball de Spike Lee.
4. Brandy Viejo Vergel- «Una cubanderas»
Todo mal. Los Lobos se prestan, una vez más, para levantar sonoramente una película gringa que le juega al «mexicanou», con un actor eterno de media tabla, Antonio Banderas. Desperado (1995), o La Balada del Pistolero, es una suerte de secuela de El Mariachi (1992) de Robert Rodriguez, que sorpresivamente pegó macizo, tanto que levantó el poder sexual del español y catapultó a Salma Hayek a las ligas internacionales del cine.
En ese entonces, las compañías alcohólicas mexicanas aún podían darse el lujo de agarrarse a la figura del momento y colgarse de su fama sin sugerir directamente el contexto ni pagar muchos derechos. Benditos sound-alikes. Uno que otro mamarracho pedía en la barra una cubanderas, con tono español. El horror.
5. Herdez- «Ahora te puedes marchar»
Otro hitazo de los genios de Herdez, que para entonces ya estaban encumbrados con el recurso de cambiarle la letra a los clásicos. Capitalizaron duro con «El sinaloense» y pensaron que a la chaviza le vendría bien identificarse con la rola del momento.
Qué rico es el champiñón. Seguro los manejadores de la carrera discográfica de Luismi se habrán forrado de una buena luz con esta tontorronada.
6. Sopa Knorr y C&A- «Californa dreamin»
The Mamas & The Papas son una banda de hippies que recordamos principalmente por dos rolas, esta y «Monday, Monday», pop sesentero de bajo calado. Muchos supimos de ellos con este comercial, que se volvió en todo un revival de la canción gracias al poder nostálgico que posee, en donde la guitarrita empata con el arraigo mexicano de una sopita caliente con el amor de mamá.
Debe ser duro que años después, esa rola que los nenes asociaron con el grito de «¡Mamá» y la dulce canción, se convirtiera en un himno de sofisticación barata postcoital, en el comercial de la marca de ropa económica C&A. Chale. Acá abajo la versión de C&A para que se den el correspondiente y legítimo quemón.
7. Canada- «Perestroika»
Uno de los puntos más álgidos de la publicidad mexicana. El productor Pedro Torres y un presupuesto de miedo generaron conmoción con este comercial de 1991, en donde toda la gran producción se fue al casting, idea y hasta el diseño exclusivo de la canción para la línea de calzados 100% mexicanos Canadá, línea de zapatos con diseño industrial pero con su toque chic.
Todo estaba en su mero punto cuando salió este comercial: el techno industrial se ponía de moda en plan callejero, el movimiento de regeneración de Gorbachov que llevaba el nombre de la línea de zapatos, era en el fondo la apertura de la Unión Soviética al bloque occidental y al capitalismo.
Tener unos Canadá fue la onda, sobre todo para las clases bajas, esas que vieron con expectativa la premiere del comercial (tres minutotes en su versión larga), en el programa Siempre en Domingo de Raúl Velasco. Irónicamente, Canadá era una marca mexicana que hizo un comercial a la rusa con ese afán internacionalizador, en donde la posterior entrada del capital ruso acabó comiéndosela. Chin. Pero la rola aún la balbuceamos algunos.
8. Calippo- «Alright»
A mediados de los noventa, tantito antes de que la Internet acabara de explotar bien, las novedades musicales nos seguían llegando a cuentagotas, pero ya sabíamos que el britpop se estaba cocinando.
En Oxford, Radiohead la llevaba bien alta con The Bends, pero para la chaviza ligerona, Supergrass se había aventado uno de los debuts más macanudos del 95 con su disco I should coco. Pero al gual que Radiohead con su debut años atrás, Supergrass sufrió las duras consecuencias de que su mayor hit fuera un poco también su calvario comercial. Claro, con sabor a paleta de hielo con pintura y miles de dólares en el camino. México era joven y bello: «¡Ah sí, es la rola del comercial de Calippo!»
9. Alka Seltzer- «Funiculi, Funicula»
Uno de los emblemas italianos del siglo pasado. La canción original de Luigi Denza, con letra del periodista Peppino Turco, suena a ópera cotorra, porque lo es. Su origen celebra la apertura del primer funicular del Monte Vesubio (piense usted que le componen una sonata al teleférico Mexicable del Estado de México), y trae un ritmo y un humor bárbaros.
Para darnos un quemón, la letra dice algo más o menos como:
«Ayer en la tarde, Carolinita, yo escalaba.
¿Sabes adónde?
¡Adonde ningún corazón ingrato me puede fastidiar!
En donde un fuego arde, pero si huyes,
¡te deja en paz!
¡No te persigue, no te derrite, sólo por mirar!
¡Vamos, vamos, vamos a la cima!
¡Funiculir, funicular, funiculir, funicular!»
Por eso es de genios y no menos, que alguien, quien sea don músico jingle maker o marquetero sin respeto, se haya echado el tiro de hacer un cover a semejante canción napolitana, sirviendo a los casi inocuos alka seltzer (remedio chambón cuando uno ingiere de más), pero que en su camino se encontró con la posibilidad de hacer una hermosa y edificadora oda al buen comer del mexicano.
El comercial hace la dupla perfecta con la canción, ya que es un recap muy guapo de mexicanos haciendo algo que se nos da: empacarle con ganas y estilo. Pocos comerciales han resumido con tal tino la gastronomía mexicana con tan poco. De magos.
10. Del fuerte- «Los tomatitos»
Una canción que da pena cantar si uno tiene dos dedos de frente o si ya salió del kinder, pero que entraña el espíritu total de esta lista. El jingle setentero ‘Los Tomates Del Fuerte’ logró que los comerciales comenzaran a dejar de ser hablados y así empezó una avalancha de canciones y recursos más variados de seducción. Antes de esto todo era «señora, las pilas rayovac…», y en la incipiente experimentación, palabras como verdugo o muerte se valían. La original decía:
«Estaban los tomatitos
muy contentitos
cuando llegó el verdugo
a hacerlos jugo…
‘¡que me importa la muerte!’, dicen a coro, si muero con decoro en los productos Del Fuerte.»
Una muerte digna en una fantasía verdulera. Pero los noventa ya prometían corrección política. También aquí debió nacer el Súper portero de Derbez y las ganas inminentes de autocensura. Hoy ya casi nadie dice decoro, siquiera:
«Estaban los tomatitos
muy contentitos
cuando para su suerte llegó Del Fuerte».
La rola sigue, aunque el puré de tomate Del Fuerte sea un asunto casi de abuelitas que compran en tiendas del ISSSTE.
A veces parece que llevamos el «No» de serie en cada una de nuestras frases, sobre todo con los niños. Pero educar diciendo que no de forma positiva es posible. En ocasiones ni siquiera tendrás que pronunciar el temible no para obtener mejores resultados con los más peques de la casa.
«No corras por el pasillo», «No grites», «No comas así», «No digas eso», «No contestes», «No subas las escaleras», «No bajes las escaleras»… es no parar nunca. Ellos nos imitan y lo único que conseguimos es que adopten una conducta y un vocabulario similar.
No se trata de permitirles todo. Debe existir un equilibrio sano entre permisividad e intransigencia. Pero lo más importante es marcar esos límites no con un no, sino de una forma positiva y constructiva.
Sin utilizar el no, los niños entenderán mucho mejor el porqué de las normas, serán más responsables de sus actos y sus consecuencias. Además, actuarán de forma más autónoma y, por supuesto, tendrán una mejor autoestima. Así, evitaremos berrinches y enfados sin sentido.
¿De qué forma puedo decir no sin utilizar esa palabra?
La siguiente tabla te da algunos ejemplos con los que cambiar el lenguaje de forma positiva y evitar que el no pierda su significado. Deja ese no para lo realmente importante, como cruzar la calle sin ir agarrado, asomarse a la ventana, etc. Es decir, para aquello que pueda suponer un peligro para el niño.
Te damos algunas ideas de cómo decir no sin utilizar esa palabra:
Sugerir otra cosa que puede hacer
Si no podemos ir al parque, podemos cocinar en casa, colorear, etc. Siempre podemos encontrar una alternativa a esa cosa que no podemos hacer.
Posponer la petición hasta que realice
Si en ese momento no se puede llevar a cabo lo que quiere o estamos ocupados, podemos dejarlo para otro momento, pero hemos de recordar cumplirlo.
Explicarle qué ocurrirá si hace lo que quiere
Si pega a su hermano, si rompe los juguetes, si hace algo malo o que se supone no debe hacer, siempre habrá consecuencias y debemos explicarlas de forma sosegada. No podemos olvidar que cada acto tiene su consecuencia; algo que, a veces, no les recordamos a los más pequeños.
Aclararle las normas
Antes de tener que prohibirles nada, explica las normas que tenéis en casa y por qué son como son. Así los más peques comprenderán lo que pueden o no pueden hacer y anticiparán la respuesta.
Debo confesar que lo hago y, al parecer, no soy la única. Numerosas encuestas revelan que son muchos los adeptos a este método. Según un estudio de la BBC con miembros del programa Body Positive en Reino Unido, un 46% de los consultados tiene por costumbre habitual no levantarse de la cama e ir posponiendo la alarma varias veces.
Cada uno lo justifica a su manera, unos porque les gusta alargar los minutos de descanso, otros porque se hace más llevadero el despertar de esta forma. Pero, ¿por qué lo hacemos?, ¿cómo nos afecta esta conducta? Es una consecuencia de la falta de sueño y, al contrario de lo que todos piensan, el hecho de ir posponiendo la alarma provoca que no finalice tu ciclo natural del sueño y te despiertes descansado.
En el estudio de la BBC consultaron a varios expertos en medicina del sueño para ver cómo nos afecta esta práctica diaria. Y los resultados fueron poco alentadores.
El principal problema a la hora de posponer el despertador es que tu cuerpo comienza de nuevo la fase de sueño, por lo que cada vez que interrumpas esta fase, más cansado y desorientado te encontrarás. Activamos y desactivamos nuestros mecanismos químicos tanto para entrar en el sueño como para salir de él de forma que, el cuerpo, que prefiere las rutinas, se siente en una montaña rusa de químicos que intentan activarte y, un instante después, adormecerte para intentar activarte otra vez.
A la hora de despertarnos, el sueño comienza a ser más ligero y susceptible a lo que está pasando en el exterior, aumenta la temperatura y se activan unas hormonas que ayudan a generar la energía para ponernos en marcha. Por lo que el simple hecho de tener una alarma a diferentes horas cada día ya es un trastorno para nuestro cuerpo. Si añadimos las sucesivas postergaciones, solo podemos empeorar la situación.
De esta forma nacen nuevos trastornos biológicos del sueño como el de inemuri, la costumbre japonesa de quedarse dormido en cualquier parte.
Cuando es habitual necesitar muchas alarmas para despertarse, seguramente también haya mucha falta de sueño detrás de ello. Los expertos en medicina sostienen que si dormimos una media de 8 horas diarias, no nos va a costar despertarnos; pero si no establecemos una rutina de sueño y no respetamos algunos consejos básicos, los trastornos derivados pueden ser muy peligrosos para el organismo.
Así que ya tienes un buen motivo para romper con este hábito. ¡Yo ya lo he cambiado!
La prestigiosa publicación Travel & Leisure eligió esta semana a la localidad mexicana de San Miguel de Allende como “la mejor ciudad del mundo” por la experiencia que ofrece al turismo internacional, de acuerdo con su lista anual correspondiente al año 2017.
Por Yahoo! Noticias
Basado en una encuesta entre sus lectores, la publicación otorgó una puntuación de 92.12 puntos a San Miguel de Allende, en el central estado de Guanajuato, por encima de la estadounidense Charleston, en Carolina del Sur; y de Chiang Mai, en Tailandia. Asimismo, en sexto lugar fue elegida la ciudad de Oaxaca.
La revista describió a la ciudad mexicana como “un tesoro colonial anclado por el jardín central, una frondosa plaza marcada por cafés al aire libre y la color de rosa Parroquia de San Miguel Arcángel”, que atrae tanto a mexicanos como a expatriados estadunidenses.
Resaltó la importancia de las galerías de arte y de sus textiles, así como de boutiques independientes que venden productos artesanales.
Entre los puntos interesantes de la ciudad mencionó la Fábrica La Aurora, una antigua productora de textiles que se ha convertido en una serie de galerías de arte contemporáneo, así como los restaurantes de comida mexicana ubicados en calles empedradas rodeadas de casas históricas.
Según un lector de la revista encuestado, San Miguel de Allende es “uno de los destinos más auténticos, creativos y económicos”, además de que comentó que en sus viajes ha descubierto “otros buenos restaurantes y actividades, pero la ciudad todavía mantiene su herencia mexicana, su cultura y su encanto”.
San Miguel de Allende, cuya parte antigua ha sido reconocida como patrimonio de la humanidad por la Organización de Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco), fue seleccionada como la mejor ciudad para el turismo por primera vez en los 22 años que Travel & Leisure realiza la encuesta.
Tras San Miguel de Allende, Charleston y Chiang Mai, fueron ubicadas las ciudades de: Kyoto (Japón); Florencia (Italia); Oaxaca; Hoi An (Vietnam); Ciudad del Cabo (Sudáfrica); Ubud (Indonesia); Luang Prabang (Laos); Sante Fe (Estados Unidos); Roma (Italia); Siem Reap (Camboya); Udaipur (India); y Barcelona (España).
La revista destacó que todas las ciudades seleccionadas comparten varias características: casi todas son peatonales, tienen amplios espacios verdes y cuentan con una rica historia que es cuidadosamente preservada a medida que crecen.
La lista considera las experiencias de los viajeros, que toman en cuenta paisajes y lugares de interés, así como cultura, gastronomía, calidez, compras y valor en general.
Quiero compartirles una de esas «verdades» de las que nadie habla en una familia, esperando les sirva de algo mi texto. Diré algo fuerte y de antemano me disculpo con todos los que forman parte de mi familia.
Por Gala Camberos
Vengo de una familia materna con muchos comportamientos disfuncionales que ahora puedo ver y en los que trabajo todo el tiempo, esto ha sido motivo de profundo dolor en el sistema. En este sentido les platico que aprendí desde muy niñita que cuando te enojas con alguien debes dejarle de hablar por días, meses, años o quizás ya mejor para toda la vida «para que se le quite a fulanito y jamás se le ocurra volverse a equivocar o llevarte la contraria», en la familia de mi madre se castiga con el látigo del desprecio y se le aplica «la ley del hielo» a todo aquel que no piensa, no siente, no actúa, no vive, etc… «exactamente como lo quiero yo». ¡Qué terrible!
Aprendí también que la soberbia es supuestamente un «gran recurso» para limpiar tu honor, tu ego herido. No tienen idea, mientras escribo esto, cómo puedo cobrar consciencia de la náusea que se produce en mi estómago con sólo recordar todo este veneno.
Hoy soy consciente del terrible dolor que llevamos muchos en este clan producto de esa toxicidad, de todas las heridas y cicatrices que nos han marcado por tantos años, puedo ver cómo se rompieron relaciones de manera profunda, como se excluyó del clan y se sacó de la cueva a varios que jamás volvieron a hilvanarse a la red, puedo ver el desastre y la devastación que nos ha dejado a muchos que como yo, nos hemos sumido en esas pestilentes y putrefactas arenas movedizas que dejaron en la total depresión, en el olvido, en el rezago a varios que como a mi madre, les costó incluso la vida, entre otras cosas, por el aislamiento en que se les dejó, por el olvido, por la indiferencia, la apatía y la falta de amor con que «pseudo vivieron». Qué nivel de crueldad… me hiela. De hecho escribo esto mientras me acompaña una profunda tristeza.
Hoy puedo ver cómo las incompetencias conversacionales han sido el reemplazo de lo que en su momento debió ser AMOR, paciencia, tolerancia, respeto, aceptación, empatía, escucha, solidaridad, generosidad para cuando el otro se cae o entra en su sombra, hoy puedo ver tantas y tantas carencias en este equipo de trabajo llamado familia materna y lo peor es que siguen estos comportamientos «silvestres» y no lo digo con desprecio sólo porque yo ya lo entendí, sino con el profundo dolor que me embarga ver esta situación y la impotencia que a veces siento por cambiar este rueda tóxica que se repite una, otra y otra vez.
En fin, hoy sólo les diré por ahora algo pues me encuentro muy removida… si alguien te importa de verdad deja de lado tu tonto orgullo, tu altivez, la arrogancia, el desprecio, la humillación, la prepotencia, la descalificación-supresión, la intolerancia, deja de lado esta absurda LEY DEL HIELO que lo único que demuestra es una terrible carencia interna de recursos de pensamiento-sentimiento-acción… habla o incluso grita si es necesario, pues a mi juicio…
SIEMPRE SERÁ MEJOR UN ALARIDO EN FAMILIA BAJO EL MISMO TECHO QUE NOS COBIJA, QUE UN SILENCIO CALLADO EN LA SOLEDAD, CREYENDO QUE CON ESO SOLO CASTIGAS AL OTRO… NO, CON ESO CASTIGAS A MUCHOS EN TU SISTEMA FAMILIAR… EMPEZANDO POR TI.
Espero que puedan mirarse en el espejo de nuestra herida familiar y que esto les ayude a suspender su propio sufrimiento y a aprender de nuestra historia que lamentablemente se sigue repitiendo.