Según el informe mundial sobre las drogas del año 2016 realizado por la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito, se calcula que 1 de cada 20 adultos, es decir, alrededor de 250 millones de personas de entre 15 y 64 años, consumieron por lo menos una droga en 2014.
Las muertes por sobredosis representan aproximadamente entre un tercio y la mitad de todas las muertes relacionadas con las drogas, que en la mayoría de los casos se deben a los opioides. El período inmediatamente posterior a la excarcelación se asocia con un aumento considerable del riesgo de muerte por causas relacionadas con drogas (principalmente por sobredosis), cuya tasa de mortalidad es mucho mayor que la mortalidad por todas las causas en la población general.
Las personas que se inyectan drogas se exponen a algunos de los peores daños para la salud asociados al consumo de drogas sin precaución, así como a un deterioro general de los resultados de salud, lo que incluye un alto riesgo de sobredosis, mortal o no, y a mayores probabilidades de muerte prematura. Una de cada siete personas que se inyectan drogas vive con el VIH, y una de cada dos con la hepatitis C.
El cannabis, cuyos consumidores sumaron 183 millones en 2014, sigue siendo la droga de consumo más frecuente en el mundo, seguida de las anfetaminas. El uso indebido de opiáceos y opioides sujetos a prescripción médica, cuyos consumidores se estiman en 33 millones, es menos habitual, pero los opioides siguen siendo sustancias destacables por sus efectos potencialmente nocivos para la salud.
En general, los hombres tienen una probabilidad de consumir cannabis, cocaína o anfetaminas tres veces mayor que las mujeres, y estas tienden más que los hombres a consumir opioides y tranquilizantes con fines no médicos. Las disparidades de género en el consumo de drogas pueden atribuirse en mayor medida a las oportunidades de consumirlas en un entorno social que a la mayor o menor susceptibilidad o vulnerabilidad de uno de los géneros al consumo de drogas.
Según una versión anterior del informe, uno de cada diez consumidores tiene serios problemas de drogodependencia. De esos 27 millones de “consumidores problemáticos”, la mitad de ellos (12,19 millones) usan sustancias inyectables, y se estima que 1,65 millones estaban afectados por el VIH en 2013. La droga que genera más problemas de salud y fallecimientos es el opio, “lo que puede atribuirse a la relación que existe entre el consumo de opiáceos y el consumo de drogas inyectables, el VIH, el Sida y las muertes por sobredosis”, señala el documento. Entre los consumidores de drogas inyectables, como la heroína, la mortalidad es 15 veces mayor que en otras personas de la misma edad y sexo que no las usan, debido a la posible transmisión de enfermedades infecciosas y sobredosis.
Según informes del Centro de Control y Prevención de Enfermedades (EEUU), estas son las 10 drogas que han causado más muertes por sobredosis:
Heroína
Este informe revela que el uso de heroína se ha incrementado en Estados Unidos, tanto en hombres como mujeres, en casi todos los grupos etarios y en todos los niveles de ingresos. La heroína es la droga número uno responsable por casos de sobredosis letales.
En una sobredosis de heroína, el sistema de la persona puede dejar de funcionar, lo que lleva a una depresión respiratoria letal y a un ritmo cardíaco más lento o a su detención. Además, es posible tener una sobredosis después de usar heroína por primera vez, o la primera vez que se recae después de dejarla.
Cocaína
La cocaína es la segunda droga más popular involucrada en sobredosis letales. Las personas que usan cocaína a menudo la toman repetidamente dentro de un periodo corto de tiempo, en dosis cada vez más altas para mantenerse drogadas. La sobredosis de cocaína afecta al corazón, aumentando el ritmo cardíaco y la presión sanguínea de manera drástica y, a menudo, peligrosa.
Oxicodona
Esta medicación opioide es usada para tratar el dolor. A su vez, la droga es altamente adictiva, lo que significa que los usuarios suelen sentir la necesidad de incrementar la cantidad consumida para alcanzar los mismos sentimientos, y por ende las sobredosis pueden ocurrir. La adicción a oxicodona a menudo se ve marcada por comportamiento letárgico y disminución del ritmo cardíaco y patrones de respiración extraños.
Alprazolam
También conocido como Xanax, es utilizado para tratar la depresión y los problemas de ansiedad. Las sobredosis de este tipo de drogas suelen resultar en depresión del sistema nervioso central, desde la somnolencia hasta el coma. Una persona ansiosa que busca alivio podría combinar el fármaco con alcohol. Una mezcla potencialmente mortal.
Fentanilo
Es un opioide sintético, similar a la morfina, y usado para tratar el dolor. Una sobredosis de esta droga resultará en baja presión sanguínea, ritmo cardíaco lento y somnolencia excesiva.
Morfina
La morfina es usada para tratar el dolor moderado y severo, pero también es una droga altamente abusada. Una sobredosis de morfina causará respiración superficial, respiración lenta y dificultosa o ninguna respiración en absoluto.
Metanfetamina
Un estimulante adictivo, abusado por su efecto eufórico. La sobredosis de metanfetaminas puede causar un incremento del ritmo cardíaco, ataque cardíaco, presión en sangre alta y temperatura corporal alta.
Metadona
La metadona es un narcótico opioide más comúnmente usado para ayudar a los adictos a la heroína con los síntomas de la abstinencia. Sin embargo, también se abusa de esta droga cuya sobredosis puede resultar en respiración lenta y ritmo cardíaco lento, somnolencia severa y debilidad muscular.
Hydrocodona
Es un medicamento opioide para el dolor. Una sobredosis puede resultar en baja presión sanguínea, pulso débil y dificultad para respirar.
Diazepam
Clasificado como una benzodiacepina y se utiliza para tratar los trastornos de ansiedad, síntomas de abstinencia del alcohol, o espasmos musculares. Una sobredosis puede causar mareos, confusión, somnolencia y falta de respuesta.
Según el informe de la ONU, Asia registró 81.100 fallecimientos relacionados a las drogas, América del Norte 43.300, África 37.800, Europa 16.900, América Latina y el Caribe 6.000, y Oceanía 2.000. La cifra total de fallecimientos es prácticamente la misma que en años anteriores.
Fuentes: Medical Daily| Centers for Disease Control and Prevention |Unodc
www.psyciencia.com/2017/25/las-drogas-mas-letales/